En reciente visita del Presidente de la República a nuestro Estado, desde mi punto de vista, mal gobernado actualmente por Silvano Aureoles Cornejo, el jefe del estado nacional fue abucheado por un grupo que indudable y previamente fue adoctrinado con antelación por algún metiche o admirador del gobernador, o bien, por provocadores, con el objetivo de molestar y ridiculizar a Andrés Manuel López Obrador sin lograr su objetivo.
Estoy cierto que no fue promovida por el gobernador de Estado, pues mayor fue el “desgaste” para Silvano. Esa interacción “popular” tal vez ordenada por algún “segundón” inmerso dentro del gabinete, con el adjetivo de quedar bien con su jefe, o efectivamente para molestar al Presidente de la República.
Con esas acciones tan poco diplomáticas le hace más daño al gobernador Aureoles, pues actos tan estúpidos pudieran provocar la detención temporal de los recursos económicos que el Estado de Michoacán recibe desde el centro de la República. Por lo mismo creo que no hubo orden alguna generada desde la oficina del gobernador.
En el otro lado de la moneda y como es del conocimiento público, en las elecciones realizadas hace poco más de 18 meses, el voto mayoritario le fue otorgado al oriundo del Estado de Tabasco, sin que sus oponentes, principalmente del PAN y del PRI negaran el triunfo obtenido por el tabasqueño.
Es innegable también que el Presidente de México ha venido actuando de manera tal que, pasados los primeros 18 meses de su protesta como Jefe de la Nación, diariamente y desde las siete de la mañana, Andrés Manuel informa sobre las actividades y acciones realizadas buscando el mejor beneficio para los mexicanos y, en primer lugar, ayudar o alivianar a los sectores sociales más desprotegidos, incluidos desde luego, a los manipulables ciudadanos que trataron de molestarlo en el Michoacán nuestro.
Me ufano de conocer bien a Andrés Manuel, con quien hice contacto por instrucciones del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, allá por los primeros meses de los años de 1987, antes del inicio de sus caminatas desde la capital de Tabasco, Villahermosa hacia el centro de la República, buscando se respetaran los resultados electorales en el proceso electoral en ese paraíso tabasqueño.
Pero volviendo a Michoacán, el minúsculo grupo de “estorbantes” del gobernador Michoacano, que peroraban, sin argumento alguno y solo siguiendo las instrucciones, seguramente de otros “estorbantes” que creen así, ayudar al gobernador del Estado y que más degrada a Silvano.
En fin, cosas grotescas suceden y terminarán cuando conozcamos un poco más de lo que significa o es la Política como ciencia que es.
No confundamos, como ya lo he comentado en meses pasado, la “grilla” con la política. No confundamos, la política no es la mentira; es la búsqueda incansable para el mejoramiento y desarrollo de la sociedad en lo general.
La falsedad es lo contrario a la verdad y el arte de gobernar siempre es un desafío que busca permanentemente el mejor desarrollo de la humanidad.