LA PSICOLOGÍA EN EL DERECHO: ¿Plena libertad y buena conciencia; en la toma de decisiones de las mujeres?

La decisión tomada por el Presidente de la Republica de los Estados Unidos Mexicano Andrés Manuel López Obrador de manera conjunta con la Secretaria de Gobernación, el Secretario de Hacienda y Crédito Público y la Secretaría de la Función pública con fecha 22 de abril de este año de 2020, publicado al día siguiente en el Diario Oficial de la Federación en su edición vespertina, mediante el Decreto de Austeridad, para honrar a la eficiencia, honestidad y justicia de la Administración Federal y con motivo de la crisis mundial del modelo Neoliberal; determinó la reducción presupuestaria del 75 % de las partidas de servicios generales y materiales, así como de la de suministros a toda la Administración Pública Federal así como a los organismos públicos descentralizados y dentro de estos se encuentra el Instituto Nacional de las Mujeres (InMujeres); y para poner a la consideración de la autoridad interna del Instituto, hasta el miércoles 15 de julio (2020) una vez que lo permitieron las condiciones de la pandemia se reunió de manera virtual su Junta de Gobierno para tomar una decisión al respecto mediante votación hacia el interior de INMUJERES, cuyo resultado fue avalar la reducción presupuestaria del 75% lo anterior no obstante que hubo un empate técnico ya que de los 26 asistentes a la reunión con voz y voto 13 votaron a favor y en contra y abstenciones sumaron 13 solo que la Presidenta de la presidencia tiene voto de calidad por eso se dio él ha lugar, el que tuvo 10 votos en contra y 3 abstenciones.

Posterior a esto y en declaración a medios Olga Sánchez Cordero y Alejandro Encinas, Secretaria de Gobernación y sub Secretario de Derechos Humanos de la misma Secretaria manifestaron, que los derechos de las mujeres serian respetados y que los estados tendrían presupuesto suficiente para atender la violencia contra la mujer.

El decreto de austeridad, tiene una “perfecta justificación” según la Federación hace referencia a una necesidad de reajustes financieros derivados de la crisis económica en el país a consecuencia de una pandemia que además se escucha ya no parara e inclusive auguran un repunte aun cuando no ha concluido el brote inicial; pero bueno, información que corre como un secreto a voces por el país.

La parte más triste y decepcionante es el mensaje de las autoridades: la mujer que está al frente de la Secretaría de Gobernación apelaba a comprensión y solidaridad y pedía al Inmujeres encontrar la manera de hacer lo mismo con menos dinero.

Y aquí se impone la pregunta ¿Es real, lo que propone? Porque, se ha luchado por presupuestos igualitarios ya que históricamente, esta desigualdad nos coloca en discriminación, aunado al mensaje cargado de un pensamiento patriarcal de sometimiento a las mujeres, que se traduce en, ¡no tienes derecho a más!, limítate a lo que tienes y además esfuérzate no solo para hacerlo rendir, sino haz más con eso.

Este mismo mensaje trasladado al ámbito familiar, se convierte en violencia económica de estado y en consecuencia en una omisión reprobable, porque se infiere a las mujeres y con esto se acredita la falta de sensibilidad, la violencia económica a la que me refiero está tipificada en la Ley General de Acceso a una vida libre de violencia en el artículo 6 en su fracción IV. Violencia económica. – Es toda acción u omisión del agresor que afecta la supervivencia económica de la víctima. Se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus percepciones económicas, así como la percepción de un salario menor por igual trabajo, dentro de un mismo centro laboral

Sánchez Cordero, con su mensaje les dice a los hombres tienen razón, violenten económicamente pues, ellas pueden hacer más con lo que tienen y a las mujeres les dijo vivan sometidas porque no habrá más.

Y aunque el discurso de la reducción del presupuesto es que solo afectara a los capítulos 2000 y 3000, y de acuerdo con el clasificador Objeto del Gasto para la Administración Pública Federal corresponde a materiales y suministros y servicios generales, respectivamente. Suena perfecto ¿no creen?, ahora revisemos que corresponde a cada capítulo, solo hare mención de algunos conceptos para este análisis; lo que la federación pretende hacernos creer es que se va a limitar al pago a materiales y útiles de oficina (papelería), material de limpieza (básica para la prevención de COVID en los espacios laborales), medicinas y productos farmacéuticos, combustible lubricante y aditivos estos corresponden al capítulo 2000.

Y en el capítulo 3000, disminuirán energía eléctrica, gas, agua, servicio de teléfono, servicio de acceso a internet, arrendamiento de edificios o arrendamiento de equipos y bienes informáticos, arrendamiento de vehículos, servicios para la capacitación a servidores públicos, servicios relacionados con traducciones, servicios de vigilancia, conservación y mantenimiento de los inmuebles, difusión de mensajes sobre programas y actividades gubernamentales y viáticos.

¿Entonces como operaran?, la lectura es clara… si limitas la operación sigue la desaparición de la institución creada como parte del mecanismo para el adelanto de las mujeres.

Y si alguien quiere seguir creyendo en esto; les recuerdo que, a pesar de un falso mensaje del Presidente Andrés Manuel, (les invito a que lo escuchen de forma crítica, no se requiere de mucho conocimiento en psicología de la mentira para darse cuenta que el tipo miente, pues su discurso es parecido al de un padre/madre con un adolescente cuando lo cachan en alguna movida -conducta impropia de un adulto y para el asunto de esta participación tratamiento a las mujeres en igualdad frente a toda la administración pública lo que deviene en discriminación por genero-) lleno de inconsistencias, vago y trastabillante en donde al final, parece que logra articular el mensaje de que no habría recortes para la atención a la violencia contra las mujeres sin lograrlo; ya que, el recurso destinado a la alertas de violencia de género ya había sido motivo de una considerable reducción, a la que se suma esta para dos rubros que llevaran casi a la parálisis de esta parte importante en el rescate de las mujeres.

Lo anterior, es lo que sucede en el país, cuando el ejercicio del presupuesto no tiene incluida la perspectiva de género; porque les recuerdo que efectivamente estamos en una pandemia que obliga a redireccionar esfuerzo en materia de salud y que dentro de esta se encuentra la salud mental de las mujeres agredidas, por ello la modificación al presupuesto tendría que ser a favor; es decir mediante un incremento en la proporción en que ha escalado el agobio hacia las mujeres, en estos tiempos de confinamiento y no en el sentido en el que lo hace el gobierno federal porque esta es una mala señal hacia las mujeres; ¡así no, Presidente!

Cierro mi participación retomando el mensaje de la diputada Celenia Contreras, invitada permanente en la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de las Mujeres, en representación de la Cámara de Diputados, quien manifestó en sus redes sociales que “ninguna mujer en uso de su plena libertad y buena conciencia podría votar a favor de este recorte, es un atentado contra la dignidad de millones de mexicanas”.

Que tristeza saber que las mujeres que representan las políticas públicas de este país; se encuentran bajo la misoginia del patriarcado, que nos les permite elegir con libertar lo que es mejor para las mujeres.