La Universidad Michoacana ante los retos del coronavirus

La semana pasada el rector Raúl Cárdenas Navarro de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo tuvo una reunión con la Dra. Diana Carpio Secretaria de Salud en Michoacán y representantes de la comunidad estudiantil de la propia universidad para impulsar una campaña de prevención de la salud en relación a la pandemia del coronavirus.

Los representantes estudiantiles manifestaron un conjunto de inquietudes sobre el problema y como afecta la actividad académica en la universidad, al mismo tiempo expresaron su inquietud de volver a clases presenciales y los problemas que representan las clases virtuales, principalmente en aquellas licenciaturas donde la practica en el laboratorio es de primera importancia.

Por su parte el rector Cárdenas Navarro afirmó que en  el próximo semestre no se podrá volver a las clases presenciales y por lo tanto se tendrá que utilizar todos los recursos tecnológicos y las plataformas virtuales para llevar las clases en línea y para ello se está llevando a cabo un programa de capacitación entre los profesores nicolaitas.

A su vez, la Dra. Carpio manifestó que su presencia en la reunión era con el propósito de que la comunidad universitaria nicolaita impulse una campaña hacia dentro y fuera de la universidad que tenga un impacto entre la población de Michoacán, debido a que los más de 50 mil estudiantes de la universidad nicolaita proviene de la mayoría de los municipios del estado y pueden promover las medidas de salud para romper la cadena de contagios del coronavirus en Michoacán.

De lo anterior se pueden sacar algunas conclusiones importantes, en primer lugar se reconoce las medidas por parte de las autoridades universitarias nicolaitas, el hecho de que no existen las condiciones de seguridad para volver a las clases presenciales por este semestre por lo menos que hacerlo constituye un gran  riesgo  donde la actividad académica presencial significaría un foco de contagio para todos los miembros de la universidad nicolaita.

El segundo aspecto a destacar es la campaña de promoción de la prevención de la salud con relación al coronavirus que puede desarrollar la comunidad universitaria con su mas de 50 mil miembros en toda la población de Michoacán, pero para ello se necesita trabajar una estrategia muy detallada tanto al interior de la universidad como al exterior donde se requiere la participación interdisciplinaria de los especialistas nicolaitas, tanto del área de la salud  como de las ciencias sociales y humanidades, además de las económico y administrativas para construir escenarios en base a principios científicos y filosóficos  que contribuyan a romper la cadena de contagios del coronavirus, en este sentido la Universidad Nicolaita tiene mucho que aportar para el beneficio de la población michoacana.

Un tercer aspecto es el proceso de adaptación de la actividad docente y de investigación de la Universidad Michoacana donde no se encontraba preparada y que ha avanzado para adecuar su actividad académica.

Pero, la universidad tiene que hacer a través de la comunidad universitaria una revalorización de su función no solo académica sino también social, porque la vida universitaria ya no será igual y todas las arias de conocimiento y disciplinas con la que se forma los profesionistas tienen que pasar por plantear nuevos paradigmas desde los filosóficos, científicos y tecnológicos, más aun cuando la actividad docente será de forma virtual.

Nadie niega hoy que la humanidad está pasando por una profunda crisis humanitaria y social donde los paradigmas científicos están seriamente cuestionados para ofrecer alternativas y soluciones a la nueva problemática, en especial todo lo que se refiere a la salud.

Los sistemas sanitarios y las políticas públicas de sanidad están hechos pedazos, los primeros por toda una política de austeridad llevada a cabo por los gobiernos y la segunda por los mismos resultados obtenidos en su implementación por una  estructura administrativa burocrática.

Es por ello que en lo que le compete a la docencia y la investigación en lo que se refiere a la ciencia de la salud tiene que incorporar fundamentos filosóficos en sus planes y programas de estudios, al igual en todas las demás aéreas de conocimiento científico, particularmente a lo que se refiere a las ciencias llamadas duras como la matemática, la física, la química y otras más que en apariencia no tienen nada que ver entre sí.

Lo anterior significa la incorporación de la docencia y la investigación con principios y valores que por fortuna la universidad nicolaita los tiene por la herencia de Don Vasco de Quiroga y toda su trayectoria al menos con una visión social. Pero se impone la necesidad de que todo lo anterior se concrete como ya se dijo en una estrategia con diferentes líneas de acción de corto y mediano plazo y con recursos financieros y materiales limitados pero con un gran potencial académico y científico con que cuenta la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, es por ello que como miembro de la comunidad universitaria le tomamos la palabra al Rector Cárdenas y  a la Secretaria de Salud, Diana Carpio, para impulsar todas las acciones y medidas necesarias para enfrentar la emergencia sanitaria en Michoacán con nuestros modestos conocimientos en materia económica y de política pública, para enfrentar los retos de la pandemia del Coronavirus en la Universidad Michoacana y en Michoacán.