Los incrementos al salario mínimo para este año 2021 han quedado aniquilados por el aumento de precios al consumidor que en la primera quincena del mes de junio aumentó el 6.02 por ciento, una de las más altas en los últimos años.
De esta manera los efectos de la apertura económica han sido negativos y con ella la pérdida del poder adquisitivo de los salarios y con ello los trabajadores que no cuentan con un salario o ingreso fijo también han sido severamente golpeados, no es casual los 9 millones de personas que han entrado en pobreza, por ello los ingresos personales ya se esfumaron a pesar de los incrementos al salario mínimo.
La inflación subyacente en mercancías fue la del periodo referido de 5.9 por ciento, para alimentos, bebidas y tabaco registró 5.94 por ciento; mercancías no alimenticias 5.84 por ciento y servicios del 3.11 por ciento. El aumento de los precios de estos productos ha impactado el bolsillo de los mexicanos.
Pero los registros más elevados de los precios se encuentra en los precios no subyacentes que registran un aumento del 10.61 por ciento, donde destacan los aumentos de los productos agropecuarios de 7.22 los productos pecuarios con 11.48 energéticos por ciento, las frutas y verduras con 2.30 por ciento, energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno de 13.3 por ciento y energético-gasolina y gas- con 18.5 por ciento. Este último aumento impacta diversamente al transporte tanto de mercancías como en el transporte público.
La inflación registrada en el país para la primera quincena del mes de junio se explica porque hay un aumento importante en la demanda, o sea, una recuperación en el consumo interno, además del aumento del precio internacional tanto del petróleo como del gas que registra un incremento del cien por ciento en lo que va del año.
El incremento de los precios al consumidor por consecuencia tiene un componente externo como interno.
Pero lo que más golpea es el poder adquisitivo de los salarios donde el tanque de gas es de un promedio de 700 pesos, mientras que el kilo de tortillas está en promedio de 16 pesos que son artículos de consumo de primera necesidad.
Mientras tanto el gobierno de López Obrador ha anunciado la creación de una empresa de gas que se llamará Gas Bienestar en que tendrá como propósito principal ofrecer el tanque de gas a un menor precio en las colonias populares y marginadas del país, pero esta medida tiene varios problema entre ellos que será subsidiaria con recursos de las finanzas públicas del gobierno federal, en pocas palabras, los contribuyentes pagarán el bajo precio del gas que venderá el gobierno de la 4T.
López Obrador no le importa las leyes económicas particularmente las del mercado de la oferta y la demanda que determina el precio de los bienes y servicios en la economía.
El aumento de la inflación en el país es un problema de capacidad productiva y de la baja productividad de las empresas, además de la crisis del sector energético del país y como ya se mencionó el aumento internacional del precio de los energéticos como consecuencia de la recuperación de la economía mundial.
Cualquiera que sea la causa económica y financiera del aumento de los precios en el país obedece también a la falta de una política económica que tenga como propósito evitar de manera productiva los cuellos de botella de los sectores productivos y particularmente en el sector agropecuario, porque no es suficiente querer controlar el proceso inflacionario aumentando las tasas de interés de referencia lo que tiene como consecuencia el aumento en el precio del financiamiento de crédito principalmente a las empresas y el consumo privado, es una medida contraproducente con efectos negativos para la población en sus niveles de vida.
Pero hasta ahora el gobierno de López Obrador no ha contado con una política tanto monetaria como fiscal que permita la pronta recuperación de la economía mexicana y por consecuencia el empleo.
Así de esta manera, al gobierno de la 4T no cuenta en términos económicos y financieros con el suficiente gas para la recuperación del país que lleve al bienestar de la mayoría de los mexicanos. Se le acaba el gas a López Obrador.
