López Obrador no deja la mayor duda de que está convertido en un gorila xenófobo en cuanto a su política migratoria en relación al problema de los migrantes centroamericanos que durante la semana pasada saco el garrote para golpear a los migrantes en su política según de contención para que no ingresaran al territorio mexicano que se ha convertido en un país de paso.
Hay que recordar esta política anti migrante está al servicio del gobierno de los Estados Unidos, primero de Trump y ahora del demócrata Joe Biden y por el otro lado el fallo de la Corte estadunidense para que los migrantes que ya habían ingresado a los Estados Unidos regresen a México para esperar la resolución de su estatus migratorio, la mayoría está pidiendo asilo humanitario, dadas las condiciones políticas, económicas y sociales de Centroamérica.
Sin embargo el pasado fin de semana la opinión pública nacional y extranjera fue testigo mediante los reportes periodísticos de cómo los agentes del Instituto Nacional de Migración y la Guardia Nacional desasían una cuarta caravana de migrantes que se encontraban en un refugio de Tapachula Chiapas mediante el garrote de los agentes de migración y los de la Guardia Nacional.
A unas madres migrantes les arrancaron de sus brazos a sus hijas sin saber su paradero, mientras que a otros los perseguían golpeándolos impunemente, cometiendo todo tipo de violación a los derechos humanos establecidos en los convenios internacionales.
El escándalo y la indignación de la opinión pública es mayúscula por la forma de cómo maneja López Obrador la política migratoria junto con su canciller Marcelo Ebrard que como ya se dijo han aceptado incondicionalmente la política anti migratoria de los Estados Unidos.
Pero el gobierno de la 4T aplica la misma medicina o peor que los agentes de migración de los Estados Unidos a los migrantes mexicanos pero con una diferencia fundamental que tiene un contenido de xenofobia, además de racista en contra de los migrantes.
Para el gobierno de López Obrador la solución a esta crisis humanitaria pasa por llevar a cabo una estrategia económica para la región donde Estados Unidos Canadá y México haga una inversión en proyectos productivos que generen crecimiento económico y bienestar para las naciones centroamericanas, a parte de una estrategia de seguridad integral, esta política no es posible debido a que el gobierno mexicano no cuenta con los recursos financieros necesarios para impulsar el desarrollo en la región, entonces la propuesta de López Obrador es pura demagogia frente a la comunidad internacional.
También el gobierno mexicano acepta el papel más sucio en la estrategia anti migratoria de los Estados Unidos de convertirse en un gorila represor en su política de contención donde se mantiene a los migrantes en condiciones inhumanas que es una vergüenza nacional, pero el presidente de la 4T no tiene el menor pudor ante los ojos de la comunidad internacional y utiliza la macana para golpear a los centroamericanos en una actitud hipócrita y miserable.
Cualquier grupo humano tiene el derecho de escoger el país que más le convenga para vivir y alcanzar todas sus aspiraciones a las que tiene derecho, además de que las fronteras son una invención artificial de los gobiernos y los estados, lo que significa que bajo el capitalismo se crearon los estados nacionales.
Por ello también es un derecho legítimo de los migrantes escoger la nacionalidad o residencia que más convenga a sus intereses y por ello en este caso concreto el gobierno de López Obrador está obligado a otorgar de inmediato las visas humanitarias que corresponden.
También para que los migrantes centroamericanos se puedan mover a lo largo y ancho del país como los nacionales y no sean víctimas de los agentes migratorios y la Guardia Nacional.
Por su parte el pueblo de México debe de ser solidario ya que también es un país de migrantes que aportan remesas para el sostenimiento de una buena parte de la población.
Mientras tanto se debe repudiar la política anti migratoria del gobierno de López Obrador y demandar el cese de la Guardia Nacional en los operativos porque va contra los derechos humanos de los migrantes.
Además que tanto la Guardia Nacional como los agentes de migración están coludidos con el crimen organizado como lo denunció un migrante centroamericano y según los especialistas las operaciones de la trata de migrantes le genera a la mafia más de 100 mil millones de dólares al año.
Es por ello que se necesita la más amplia solidaridad con los migrantes centroamericanos del pueblo de México y combatir la política anti migratoria de López Obrador al servicio de los intereses del gobierno de los Estados Unidos que vulnera la soberanía nacional y muestra al presidente como un minino dócil ante el imperio norteamericano.
