En toda sociedad cuando se da un cambio de gobierno más allá de existir escepticismo también existe esperanza, la ilusión de que ante un nuevo régimen se aspira a políticas públicas más congruentes, humanas y justas; con mayor razón cuando por todos los medios de información se presumen estas últimas; de modo que la administración del gobernador michoacano Ramírez Bedolla, tiene en su conciencia dos escenarios claros: uno, el cumplir las promesas con la palabra empeñada para con los maestros estatales, en relación a pagos pendientes o dos, quedar como auténtico mentiroso y demagogo, o sea una carta al carbón de su antecesor Silvano Aureoles Conejo.
Planteamos lo anterior porque existe en la entidad el riesgo de una tremenda irresponsabilidad o una total falta de pericia creativa por parte de Alfredo Ramírez quien a través del secretario de gobierno, Carlos Torres Piña y de la secretaria de educación en el estado, Yarabí Ávila González , mandaron el mensaje para los docentes en apuros en relación a que no se hagan ilusiones , que el próximo 15 de octubre apenas pagarán dicha quincena, y no las otro cuatro que Aureoles Conejo quedó a deber. Y bueno, se puede indicar que son pendientes de la administración próxima pasada, que a ellos les tocaba y todo lo que deseen señalar, el caso es que días antes de su toma de posesión Bedolla fue tajante: se pagarán el 15 de octubre todas las quincenas pendientes y bonos de este año en iguales condiciones. Muy bonita y reconciliadora determinación, pero ahora salen con cuentas mochas.
Tenemos presente que en círculos sociales y económicos, por todo lo que representa , fue bien recibida la notica del pago total pendiente a los maestros locales, incluso hasta parecía necedad por parte de los mentores de seguir con sus tomas , marchas y bloqueos, y aumentaron las críticas contra su movimiento , se detallaba que éstos dieran muestras de buena fe, que regresaran a trabajar a clases presenciales o ya de perdida a distancia como en el pico de la pandemia, casi los sacrificábamos por inconscientes y hasta por irresponsables, pero apenas el martes todo dio un nuevo giro, giro que a final de cuentas dio la razón a los mentores y trabajadores de apoyo que pertenecen al estado: Alfredo Ramírez no cumplirá su palabra, está quedando muy mal ¡y eso que apenas empieza.!
Lo que parecía luna de miel, inicia siendo luna de hiel. ¿Pero qué necesidad de conflictuar a los maestros estatales, al gremio en particular y a Michoacán en general? Veamos el escenario:
Cada docente estatal gana en promedio 5 500 pesos a la quincena, tienen 4 quincenas que nos les pagan, ellos cuentan con familia, pagos de servicios y compromisos de vida, son grupo de trabajadores que pertenecen a un sindicato que nomás les sueltan el pandero y hacen su propio baile, baile que a la sociedad no le gusta porque ocasiona serios problemas y sabemos las consecuencias; se les invitó a abandonar su lucha porque todo estaría resuelto en pocos días, pero a la hora de la verdad son engañados una vez más, luego entonces, ¿qué calidad moral tendrán las autoridades respectivas al incitarlos a cumplir con su deber? La respuesta es más que obvia. ¿Quién en su sano juicio se quedará cruzado de manos ante tal injustica?
Los argumentos que manejan las autoridades son infantiles, serían de risa si es que no fueran tan graves las explicaciones que ofrece: que requieren organización administrativa, que es necesario el cambio de firmas en cuentas bancarias, que no desean tener problemas con auditorias posteriores, que anhelan hacer todo sustentados en la ley para no caer en desorden. ¡Dios mío! Ante dicho panorama ¿quién puede pensar que estarían haciendo mal uso de los recursos? ¿A poco la federación no sabe de la condición de abuso, de engaño y de abandono hacia los profesores? ¿No que ya tenían en mano o negociado sabe cuántos millones para cubrir los compromisos magisteriales? Las auditorías acusan malversaciones, decisiones a favor de intereses particulares, movimientos de partidas destinadas a determinados proyectos y que son manipulados sin la autorización debida, pero ante la necesidad de los trabajadores urge solución inmediata.
Alfredo Ramírez Bedolla desde el mismo momento de la presentación de su gabinete inicio con el pie izquierdo porque el cambio prometido, con todo y pluralidad que defiende, a muy pocos ha convencido porque siendo un gobierno de extracción morenista, la población deseaba ver nuevas caras, nuevos actores (que requerían aprender como aprendieron los elegidos en sus inicios) pero nada de eso, resultó que fueron en su mayoría PRD, PRI y PAN con lo mismo.
Deseamos que las acciones que retomaron los agraviados, que quizá irán en aumento, muevan las intenciones, el corazón y la habilidad del gobernador en ciernes para que busque y encuentre las alternativas propicias y logre retomar el camino correcto, aún es tiempo de revertir su postura, aún es tiempo de convertirse en un gobierno de verdadera palabra.
El Marqués de la Fayette, general y estadista francés, advirtió: “Cuando el gobierno viola los derechos del pueblo, la insurrección es el más sagrado de los derechos y el más indispensable de los deberes”. Y Confucio, filósofo chino sentencio: “Cuando el gobernante mismo obra rectamente, ejercerá influencia sobre el pueblo sin dar órdenes, y cuando el gobernante mismo no obra rectamente, todas sus órdenes serán inútiles”. Lo referido no es nuestro anhelo; aspiramos a un gobierno con autentico liderazgo, sensato, capaz y, sobre todo, con gesto humano y solidario. Para todos es conveniente.
