La economía mexicana en cifras y la 4T

Informe de AMLO en el Zócalo. (Foto: especial)

El pasado 1 de diciembre se cumplieron tres años del gobierno de López Obrador y de su proyecto de la 4T, en medio de un proceso de crisis política porque en términos económicos el país se encuentra en crisis, a continuación se detallan algunos indicadores económicos y financieros:

El crecimiento económico reporta  de acuerdo a la medición del Producto Interno Bruto  en el mes de octubre un aumento anualizado  del 4.7 por ciento y en el tercer bimestre de menos 0.4 por ciento.

De igual manera para el mes de octubre de este año el Instituto Mexicano del Seguro Social registró 993 mil 855 empleos formales.

Como se sabe la inflación durante la primera quincena del mes de noviembre registró una tasa de crecimiento de 7.05 por ciento acumulada  en el año, la más alta en los últimos 20 años.

En cuanto a la inversión productiva, la que está destinada a la fabricación de máquinas y herramientas así como de la construcción de inmuebles  fue del 18.8 por ciento del PIB en el segundo trimestre del 2021.

Por lo que se refiere a la productividad de la economía en el segundo trimestre del 2021 tuvo un decrecimiento negativo de menos 1.3 por ciento y la tasa anualizada llegó a menos de 5.2 por ciento, lo que significa que todos los factores productivos no están trabajando a toda su capacidad y esto significa que no hay una utilización total de los factores productivos como son el capital y el trabajo.

En relación al comportamiento del desempeño de las exportaciones que representa el 13 por ciento de las importaciones que fueron del 13.2 por ciento de las importaciones de los Estados Unidos.

Otro indicador importante es el que se refiere a la pobreza laboral que representa el 40.7 por ciento de la fuerza de trabajo del país durante el tercer bimestre del 2021 y que indica que esta parte de la población que tiene un empleo informal o formal no puede adquirir la canasta básica con los ingresos laborales de su hogar lo que quiere decir que  lo que gana no alcanza para satisfacer sus necesidades más elementales.

El crédito otorgado al aparato productivo o empresas en el tercer trimestre en 2021 tan solo representó el 40.7 por ciento con relación al PIB, lo que significa la falta de financiamiento suficiente para la actividad productiva del país.

La competitividad de la economía mexicana ocupa el lugar 55 de 64 países lo que quiere decir que todavía hay factores no económicos y financieros que no permiten a la economía mexicana aumentar este índice.

Por otra parte, el valor agregado en la producción manufacturera tan solo es del 46.2 por ciento durante 2019 y los especialistas recomiendan el 50 por ciento.

La deuda pública representa un crecimiento del 2.4 por ciento a tasa anual durante el tercer trimestre del 2021 y más del 50 por ciento del PIB.

El problema de la aplicación del estado de derecho es un elemento importante para el crecimiento económico y la actividad productiva, en este sentido el 35.4 por ciento de la población considera que en la ciudad donde vive es segura.

Todos los indicadores económicos antes expuesto dan cuenta de que la economía mexicana se encuentra en un estancamiento producto de la pandemia en primer término, pero esta situación es consecuencia de la política económica llevada a cabo por el gobierno de López Obrador en casi dos años de pandemia y no quiere aumentar el gasto público para estimular la demanda agregada que está compuesta por el consumo interno, la inversión productiva y el crecimiento de las exportaciones.

En este sentido la política económica que se fundamenta en un programa de austeridad para mantener los equilibrios tanto en las finanzas públicas, el control inflacionario y la reducción del déficits en el sector externo de la economía.

De esta manera la política económica de la 4T tiene como objetivo la estabilidad macroeconómica que es una cualidad del modelo neoliberal.

Es por ello que el Banco de México  ha reportado que la economía mexicana y en particular el aparato productivo del país enfrentan problemas de cuellos de botella lo que significa que el crecimiento de la demanda es más rápido que el de la oferta agregada y esto es un problema natural después de la caída del PIB del menos 8.1 por ciento de la economía en el año 2020 como consecuencia del cierre de la misma lo que significa por ejemplo que a un enfermo grave se le pida que se levante a realizar una caminata a alta velocidad.

Por lo tanto, la recuperación del aparato productivo no es tan rápida como lo demanda el consumo de la propia economía mexicana y más aún cuando el gobierno de López Obrador se niega a atender una política económica activa y enfrentar los obstáculos como son los cuellos de botella para instrumentar políticas sectoriales y que se pueda recuperar el crecimiento económico y por lo tanto el empleo; en este sentido las autoridades financieras están satisfechas de no haberse endeudado y que la corrección de los desequilibrios económicos  sean producto de las fuerzas del mercado.

En pocas palabras todo lo anterior expuesto en indicadores económicos y la política económica de la 4T significan dos cosas, el estancamiento de la propia economía mexicana y una política de autoridad donde se le deja al mercado el ajuste automático de los desequilibrios macroeconómicos que se pueden definir como una política neoliberal de la 4T.