Pátzcuaro, Mich.- Entre libros y otros objetos, el rescate de materiales de la pintora naif y docente de piano, María Teresa Tejeda Ramos, generó el descubrimiento de una personalidad cuya trayectoria debe rescatarse, consideró el grabador Artemio Rodríguez, quien encabeza el proyecto Biblioteca del Libro Ilustrado (BLI) en Pátzcuaro y en cuyo espacio se inauguró este sábado la exposición “Dibujos y acordes cotidianos” de “Teche”, como se conoce a la artista y escritora entre la comunidad patzcuarense.
Al intervenir durante la inauguración de la exposición, Rodríguez destacó que el trabajo de “Teche” lo descubrió cuando los familiares de la pintora y maestra lo llamaron para que revisara unos “papeles” que había dejado la artista en Pátzcuaro, donde radicó hace 20 años.
En los dibujos -que son en su mayoría los materiales que se exponen-, Rodríguez encontró libros, cuadernos y pinturas al óleo, lo que lo llevó a ponderar esta exposición que llamó “pequeño homenaje” y que se puede visitar en las instalaciones que ocupa la BLI en el Centro Cultural Antiguo Colegio Jesuita de la ciudad lacustre.
De acuerdo con Rodríguez, la obra descubierta de Tejeda Ramos merece un rescate formal y ante la secretaria de Cultura, Gabriela Molina, expresó que ojalá se cuente con el apoyo para realizar una edición mínima que contenga los trabajos que dejó en la casa familiar la pintora y maestra de música, con inclinaciones también hacia la poesía.
La exposición muestra tanto los discos de la colección particular y los libros de su biblioteca, como fotografías de diversos momentos de la vida de la autora, de quien destacó Rodríguez con una viudez temprana logró formar a los hijos y dejar en Pátzcuaro una imagen de tesón y empeño hacia las artes y las actividades culturales locales.
Tejeda Ramos nació en Etzatlán, Jalisco, el 16 de agosto de 1927. Por más de 20 años vició en Pátzcuaro, donde por varios años impartió clases de piano en el Centro Cultural Antiguo Colegio Jesuita. Actualmente radica en Cancún, Quintana Roo.
La exposición permanecerá en la BLI, en el Antiguo Colegio Jesuita, hasta el 26 de junio.
