Morelia, Mich.- A un año del movimiento de la Asamblea General de Docentes de Asignatura (AGDA) en el Campus Morelia de la UNAM, que reclamó pagos de salarios y encabezó el primer paro de labores en la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES), persisten actitudes de directivos de no cumplir los acuerdos alcanzados, donde “a cambio del reconocimiento de nuestras exigencias y de nuestro derecho a la representación colectiva, nos ofrecen buzones de quejas diseñados por burócratas para no atender nada”.
En un documento en torno el primer aniversario de la movilización que levantó 23 puntos en un pliego petitorio a las autoridades, los docentes de asignatura señalan que “a cambio de la estabilidad laboral, ofrecen instrumentos manipulados y manipulables por ellos mismos para simular una regularización de los procedimientos de contratación. A cambio del reconocimiento de garantías y derechos, ofrecen la posibilidad de concedernos favores si se los pedimos de manera individual y agachando la cabeza. Esto mientras buscan la forma de deshacerse de las y los docentes de asignatura a quienes acusan de problemáticos o simplemente no alineados con su lógica desde el poder”.
La movilización de la AGDA, recuerda el documento, estuvo acompañada por estudiantes de las licenciaturas de la ENES, quienes por su parte tomaron las instalaciones del Campus en apoyo a sus maestros. Los docentes iniciaron primeramente el paro de labores virtual, en abril del año pasado, y culminó el 25 de julio del mismo año, en total fueron cien días de movilización.
“La AGDA elaboró un pliego petitorio de 23 puntos tras el estallamiento del paro de labores, puntos sencillos, prácticamente obvios, de derechos humanos, de derecho laboral elemental, de consistencia académica, de mínima equidad y de dignidad. La respuesta de la administración fue la negación, la continua y constante declaración de imposibilidad de nuestras demandas y la acusación dolosa de tacharlas de insólitas, extremas o simplemente imposibles de realizar”, destacan los docentes.
De los acuerdos alcanzados, se acordó la firma de un documento común en el que se establecen compromisos conjuntos para mantener el seguimiento de los adeudos a los docentes, una de las principales demandas, al igual que en relación a los temas de bilateralidad en la representación de la AGDA en los comités académicos y de permanencia y continuidad laboral para los integrantes de la Asamblea.
Dentro de los acuerdos, se plantea que este seguimiento se mantenga a través de mesas de diálogo, mecanismo que se aplicó después del 7 de abril -fecha en la que comenzó el paro de labores de los docentes de asignatura-, y que de acuerdo a la postura de ambas partes, deberá mantenerse para alcanzar acuerdos concretos.
La posición de la AGDA en el documento de acuerdos, fue insistir en que los trámites de aclaraciones sobre adeudos se mantuvieran de manera grupal y no de manera personalizada, como lo plantea el área administrativa de la UNAM a través de su Dirección General de Personal (DGP).
En el 2021, “la AGDA rompió los mitos de gloria y de hipocresía azul y oro que algunos funcionarios habían promovido sobre la ENES, su fundación y su trayectoria, mitos que ocultaban la discrecionalidad, el nepotismo, el uso de recursos públicos para la promoción política y personal de ciertos funcionarios, la discriminación y la precarización del trabajo que se vivía dentro de una escuela y de una institución que se ufana ante los medios de promover la inclusión, de ser socialmente responsable y de avanzada progresista”.
A la fecha, indican los docentes de asignatura, los compromisos asumidos por parte de la dirección de la ENES Morelia “distan mucho de la solución de nuestras demandas, a las cuales no hemos renunciado ni vamos a renunciar”, situación ante la que afirman, “seguiremos defendiendo nuestro pliego petitorio, seguiremos recurriendo a los métodos necesarios para hacer justicia a nuestra situación laboral y no descartamos ninguno de los métodos de lucha que hemos empleado hasta ahora”.
