Tras la propuesta de Espino, AMLO descarta diálogo con el crimen organizado

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.

Ciudad de México.- Está descartada cualquier posibilidad de diálogo entre el gobierno y los grupos del crimen, enfatizó el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de la propuesta del expanista Manuel Espino al secretario de Gobernación, Adán Augusto, de abrir la posibilidad de generar acuerdos con grupos criminales.

Según proceso.com.mx, si nosotros hemos definido una política de cero corrupción y cero impunidad y en el caso del combate a la delincuencia organizada y la de cuello blanco no hay ningún acuerdo, ningún pacto, está bien pintada la raya, la frontera. Una cosa es la autoridad y otra cosa es la delincuencia”, afirmó el mandatario federal.

El excomisionado del Servicio de Protección Federal y hoy dirigente de la “estrategia ciudadana Ruta 5” que apoya a Morena, Manuel Espino, acudió a Palacio Nacional este miércoles sin dar declaraciones; después, de acuerdo a videos difundidos en redes sociales, ante senadores de la República expuso que hizo una propuesta al gobierno federal que se reduce a aceptar la posibilidad de tener acuerdos con el crimen.

“Yo le dije al secretario de gobernación es que la propuesta que puse en sus manos iba a buscar la manera de hacerla llegar a alguno de los grupos del crimen organizado en México y logré hacerla llegar y solamente recibí respuesta de dos. Si esto se hace en México entramos. Estamos en esa tarea pero no quiero abundar más porque luego me vayan a acusar de indiscreto”, expuso. 

Agregó que esta propuesta se basa en que para conseguir un bien mayor, se consiente un mal menor que ayude a resolver lo peor y explicó que “tal vez el mal menor que había que aceptar es dialogar y acordar con ellos y se puede, atendiendo sus intereses, también los tienen”. 

El presidente López Obrador negó que Espino acudió a Palacio Nacional para hacerle esta propuesta y, previo a este cuestionamiento, afirmó que en su gobierno no habrá protección a ningún grupo del crimen y anular a otros, como sucedió durante el sexenio de Felipe Calderón.

No me hizo ningún planteamiento –aunque se le planteó que Espino aseguró que en abril pasado le hizo este planteamiento y también al secretario de gobernación- No, no -el miércoles fue a Palacio Nacional- sí pero no me hizo ningún planteamiento de eso y yo estimo mucho a Espino”, respondió el presidente.

“Lo que pasa es que no lo quieren los conservadores ni la prensa conservadora, porque resulta que Espino era presidente del PAN y se ha dedicado en los últimos tiempos pues a decir la verdad, a confesar cómo engañaron Fox y Calderón, entonces le tienen un coraje, lo ven como gallina cuando ve lombriz, lo quisieran picotear. Entonces no, no, no, es sensacionalismo, eso para salir en El Universal, les encanta eso, es como el Alarma”, arremetió el jefe de Ejecutivo Federal.

De nuevo, el presidente indicó que cuando ya no hay frontera entre el gobierno y la delincuencia se dan casos como el de Genaro García Luna, quien fue secretario de Seguridad durante la presidencia de Felipe Calderón y ahora enfrenta un juicio en Estados Unidos.

“Además el hombre fuerte de Calderón, pues qué esperanzas, si la delincuencia estaba metida en el gobierno, cuando no existe esa separación, cuando no se sabe dónde termina la delincuencia y donde empieza el gobierno no hay ninguna posibilidad de que las cosas mejoren y ¿qué hacían antes? Pues se protegía a unos  y se perseguía a otros, esos eran los acuerdos”, detalló. 

Aseguró que en su gobierno no habrá tolerancia para quienes cometen delitos, incluso si se trata de algún familiar suyo, porque todos tienen que rendir cuentas.

“Dicen: ´¿No va a cambiar la estrategia?´ Claro que no y ¿Por qué no la voy a cambiar?, primero porque estoy convencido, absolutamente convencido, de que la paz es fruto de la justicia. De que el ser humano no es malo por naturaleza porque algunos así creen. Yo sostengo que todos los seres humanos somos buenos y son las circunstancias los que llevan a algunos a toma el camino de las conductas antisociales”.

El presidente López Obrador consideró que los anteriores gobiernos no actuaron con moralidad y ahora enfrentan las consecuencias.