Por un tipo diferente de desarrollo

No se trata de estar contra el desarrollo, se trata de crear otro tipo de desarrollo, que respete la vida. (Foto: especial)

Durante la noche del lunes hubo un incendio en la paradisíaca isla de Holbox, al norte de Quintana Roo. Los vecinos de la isla se vieron obligados a extinguir las llamas ante la inexistencia de una estación de bomberos en el lugar.

Actualmente existe un enorme proyecto de “desarrollo” en Quintana Roo y Yucatán, se ostenta como generador de “progreso y de desarrollo” como panacea a la pobreza. Sin embargo, este desarrollo y este progreso es muy cuestionable, sobre todo, porque no eliminara la pobreza. Al contrario, enriquecerá aún más a las grandes empresas Turísticas e inmobiliarias, mientras a los pobladores originarios se les está despojando de sus tierras, de sus usos y costumbres, y muy probablemente de su lengua y cultura.

El martes durante la mañanera, un periodista preguntó sobre lo ocurrido en Holbox. Se mencionó que no hay estación de bomberos, así como que no hay escuelas públicas en Puerto Aventuras, perteneciente al municipio de Solidaridad, el cual fue conformado el 28 de julio de 1993 por decreto del Congreso del Estado durante el gobierno de Mario Villanueva Madrid.  

 Puerto Aventuras cuenta con una marina, playas frente al Mar Caribe y un campo de golf, sin embargo, no existe ninguna escuela pública. Existe una escuela privada llamada Colegio Puerto Aventuras. Cuenta con grandes hoteles de lujo como; Aventuras Club Marina, Aventuras Club Laguna, Hard Rock Hotel Riviera Maya, Dreams Puerto Aventuras Resort & Spa, Catatonia Riviera Maya Resort and Spa, Omni Puerto Aventuras Beach Resort, Coral Maya Turquesa (condo-hotel), Villas Picalu Studios & Suites.

Esto es solo un pequeño ejemplo del tipo de desarrollo y progreso que hay a lo largo de la Riviera Maya.

En la misma mañanera, se mencionó que existe mucho descontento entre los ejidatarios, los cuales están recibiendo pagos irrisorios por sus tierras A este cuestionamiento, se argumentó que simplemente se les está pagando al precio en que están valuadas. Para nada se mencionó el valor real de estas tierras.

Hay carencia de escuelas públicas, de estaciones de bomberos y de hospitales, pero se ostenta con bombo y platillo que hay millones de pesos para construir un aeropuerto innecesario en Tulum, el cual sumara a que se despoje más a los habitantes originarios, y las vibraciones y humo emitidos por los aviones, dañen el sitio arqueológico, y obviamente afecte a la fauna y flora existente.

El Gobierno federal pretende destinar 143,073.3 millones de pesos para ejercer en el 2023, para la construcción del tren Maya, lo que representa un incremento real del 116.5% respecto a lo solicitado el año pasado.

El tren Maya es cuestionado y rechazado por alterar el ecosistema a lo largo de su recorrido. Acabará sin duda con mucha de la fauna y flora existente. Estan acabando con maravillosos cenotes y grutas milenarias, lo más grave; están atentando contra la reserva acuífera más importante del planeta. Existe todo un laberinto acuífero, en riesgo.  Argumentan que no es así, pero basta ver lo que está ocurriendo.

Les comparto para que se den una idea, solo un pequeño dato: Según datos del Quintana Roo Speleological Survey, solo en el norte de Quintana Roo hay 358 sistemas de cuevas sumergidas, lo que representan cerca de 1400 km de pasajes inundados de agua dulce. Todo está en riesgo.

Me puse a leer sobre la historia de Holbox, se las comporto como ejemplo de lo que ha sucedido en esa parte del país.

Estas tierras han estado habitadas desde tiempos inmemoriales por los mayas. Antes de la conquista era parte del cacicazgo de Ekab, que se extendía de Cabo Catoche a la Bahía de la Ascensión, junto con las islas de Contoy, Isla Blanca, Isla Mujeres, Cancún y Cozumel. En las postrimerías del siglo XIX, las islas de Yucatán recibieron a muchos sobrevivientes que huían de la rebelión social maya, conocida como Guerra de Castas y, hacia 1891, formaron el Partido de las Islas, con cabecera en Isla Mujeres y que incluía a Holbox

Para conocer la historia de Holbox como pueblo, es necesario remontarse a julio de 1847, mes en que dio inició la rebelión campesina más importante del siglo XIX en América Latina, conocida en la historia regional como “la guerra de castas”. Ya que fue en 1854, cuando los habitantes de la isla fueron reconocidos como vecinos de Holbox.

Se denomina Guerra de Castas, al conflicto racial entre los mayas del sur y oriente de Yucatán, y la población de blancos (criollos y mestizos), que se encontraba mayoritariamente establecida en la porción nor-occidental de la península de Yucatán. La guerra, que costó cerca de un cuarto de millón de vidas humanas, inició el mes de julio de 1847 y terminó oficialmente en 1901 con la ocupación de la capital maya de Chan Santa Cruz por parte de las tropas del ejército federal mexicano.

El 24 de noviembre de 1902 se creó el Territorio Federal de Quintana Roo, por lo que Holbox quedó integrada como una Subprefectura del Distrito Norte. En 1910 la población del estado se agrupó en ocho municipios, que por motivos económicos fueron divididos en tres zonas que todavía persisten: norte, centro y sur; la zona norte comprendía los municipios de Holbox, Cozumel e Isla Mujeres. En aquel tiempo, Holbox era cabecera municipal de ocho localidades, pero poco después, en 1921, Isla Mujeres los absorbió.

A mediados del siglo XX, los poblados costeños, con pocas excepciones, aumentaron su población lo que generó una sobreexplotación de los recursos. En 1960 se dieron cambios estructurales en los asentamientos, la importancia de Holbox disminuyó y su población se redujo a escasos 500 habitantes. La década de los setenta fue clave para Quintana Roo, pues fue en esa época cuando cambió su estructura poblacional y, en 1974, se transformó en estado.

Holbox es parte de la reserva de la biósfera y Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam, creada por el gobierno federal como área de protección el 6 de junio de 1994.

Holbox es un refugio natural de varias especies, tanto en peligro de extinción como amenazadas. y la mayoría de los habitantes protegen la zona. De ahí que sea sede de proyectos turísticos sustentables buscando un impacto mínimo en los diversos ecosistemas, fauna y vegetación endémica en la zona.

Por decisión de sus habitantes dentro de la isla no hay pavimento y existen solo algunos automóviles, todas las calles son de arena blanca, lo que permite el disfrute de la naturaleza mediante el desplazamiento peatonal. Los medios tradicionales de transporte son los carritos de golf eléctricos o de gasolina y la bicicleta.

A 30 minutos de Holbox se localiza Yalahau, un manantial de aguas cristalinas que encierra tanta belleza como historia. Se dice, que posee propiedades curativas por lo que este hermoso ojo de agua es considerado como “fuente de la juventud”.  Fue un puerto mercante importante, ubicado casi frente a Holbox. Contiene abundantes humedales de agua dulce, y una historia de ocupación Maya que abarca casi 3000 años. Los mayores niveles de población regional ocurrieron durante el periodo Preclásico tardío, del 100 AC al 350/450 DC. Los Mayas construyeron alineamientos rocosos cruzando los pantanos, y existen varias hipótesis, de que estas características funcionaron para atrapar suelos y agua, para la producción de alimento y para el uso de recursos biológicos como el perifiton. (   El perifiton está formado por una compleja comunidad de organismos acuáticos que se adhieren a los sustratos bajo el agua y que son colonizados por bacterias, hongos, protozoos, fitoplancton y zooplancton).                                                                                                      Los estudios paleo ambiéntales de un humedal de la porción oriental de la región, sugieren que la ocupación de la región de Yalahau y la manipulación de los humedales, corresponden con un periodo cuando el manto freático fue menor que en tiempos modernos, creando ecosistemas de humedal que eran más productivos para el cultivo y consumo humano.

También parte de Holbox es La Isla Pájaros, la cual es un pequeño islote cubierto de manglar y cactus localizado en la laguna Yalahau o de Conil, donde habitan una gran diversidad de aves, algunas en peligro de extinción; existen dos miradores y andadores con el fin de minimizar el contacto directo con las aves, y proteger el ambiente natural sin dejar de admirarlas. Flamencos, cormorán, garzas, fragatas, pelícanos, patos silvestres, gaviotas, son solo algunas de las especies a observar en un espacio aún en estado natural.

Los habitantes de Holbox valoran y defienden la tierra de sus ancestros, de sus hijos. Se niegan al “desarrollo” representado por cemento, despojo y falta de amor y respeto a la naturaleza.

Holbox es ejemplo a seguir. Imagínense si toda la península hubiese respetado la naturaleza, sería de verdad no solo un paraíso, sino una muy importante región de conservación del planeta.

 El martes en la mañanera se insinuó que el incendio se había expandido a causa de que hoteles y casas están construidos a la usanza maya, con materiales naturales. Definitivamente esa no fue la causa de la expansión del fuego; fue que no hay una estación de bomberos, ni equipo necesario para alguna emergencia.

Es importante señalar que este paraíso, me refiero a Quintana Roo y Yucatán específicamente, históricamente han sido codiciados por potencias extranjeras. Durante la guerra de castas se planteó la división de Yucatán en dos países distintos: Uno de blancos y otro de mayas insurrectos, medida en la que tuvo gran interés el Reino Unido, al grado de que se comprometió a negociar con los rebeldes el abandono de las armas y su inserción al trabajo. Obviamente, como dijo en esos momentos Le Trait unión (tratado de unidad), los británicos se entrometieron no por cuestiones de humanidad, sino por los negocios que sostenían con los mayas y su anhelo de apoderarse de dichas tierras.

Aunque sin éxito, los criollos yucatecos habían solicitado en mayo de 1848 la ayuda del comodoro estadounidense Matthew C. Perry, poco después algunos soldados del 13° regimiento de infantería del ejército estadounidense aceptaron la oferta del gobierno yucateco para luchar como mercenarios contra los mayas rebeldes, a cambio de ocho dólares mensuales y de 320 acres de tierra que recibirían una vez que se pacificara la península. En septiembre de 1848 arribaron 938 soldados a Tekax. En abril del año siguiente se les acusó de que se conducían como conquistadores y no como personas que quisieran “ayudar”.

Si usted va a la Riviera maya, vera grandes hoteles, campos de golf, casinos, fraccionamientos privados a lo largo de las playas, donde nadie puede entrar. No se ve más el mar, solo altas bardas y fortísimas puertas, custodiadas por empleados de seguridad privada.

Gran parte de los hoteles, son de la cadena Riu, propiedad del Rey de España. Ingleses, norteamericanos, franceses, españoles, son dueños de nuestras playas, y emplean a sus propietarios originarios, de meseros, jardineros, sirvientas, hostess, barrenderos, albañiles. Esos son los miles de empleos que generan.

Grandes extensiones encementadas, con enormes construcciones, construidas muchas sobre cenotes, sin prácticamente árboles. Acaban con la selva, con manglares, fauna y flora. Incluso construyen, o incluyen en sus instalaciones vestigios de construcciones prehispánicas.

No se trata de estar contra el desarrollo, se trata de crear otro tipo de desarrollo, que respete la vida.