Pese a débitos, afirma Cárdenas Navarro que deja protegidos a sindicalizados en la UMSNH

Este pasado fin de año, no logró superar al cien por ciento su déficit financiero, por lo que nuevamente reclamó el auxilio federal

Revisión contractual 2022 en la Universidad Michoacana, en un marco de arbitrariedades de la dirigencia sindical.

Morelia, Mich.- La Rectoría de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), que encabeza Raúl Cárdenas Navarro, señaló este día que en la firma del convenio anual con la federación no se comprometieron prestaciones contempladas en los contratos colectivos de los académicos y empleados sindicalizados, al igual que señala que la autoridad universitaria “protege” las mismas, no obstante que de acuerdo con los agremiados los débitos superan el millón de pesos en la estimación más conservadora, ya que de acuerdo a trabajadores manuales y administrativos el adeudo alcanza los 80 millones desde el 2019.

Este fin de año pasado, la UMSNH no logró superar al cien por ciento su déficit financiero, mismo que le impide cubrir con los compromisos de fin de año con los sindicatos de Profesores (SPUM) y Único de Empleados (SUEUM), por lo que en los últimos años ha sido recurrente la petición de recursos extraordinarios al gobierno federal.

Aunque en los dos últimos años no se han tendido las complicaciones de otros periodos en que el pago de salarios y prestaciones como aguinaldo y otras, se cubrían incluso adelantado el año posterior, la UMSNH junto con otras seis universidades públicas -según refiere un comunicado de la Rectoría-, recurrió a los fondos extras para saldar compromisos con los sindicatos.

“Al cierre del 2022 fueron 6 las universidades públicas estatales quienes requirieron recursos extraordinarios para el cierre del ejercicio del ejercicio y hacer frente al pago de salarios y prestaciones, destacando: la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, la Universidad Autónoma de Nayarit, la Universidad Autónoma de Zacatecas, la Universidad Juárez del Estado de Durango y la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo”, se indica.

“En el caso particular de Universidad Michoacana no asumió compromisos nuevos que impliquen menoscabo a sus Contratos Colectivos de Trabajo, por lo que los compromisos adquiridos con el presente convenio fueron: Depósito de los Contratos Colectivos de Trabajo ante la Autoridad Laboral Competente, de tal forma que considere, como obligatorias, las prestaciones establecidas en el Anexo de Ejecución 2022, tanto para el personal de nueva contratación, como para los activos. Este compromiso ya fue cumplido por la presente administración”, indica la información.

Cabe señalar que en noviembre, agremiados al SPUM de la Facultad de Economía “Vasco de Quiroga” plantearon en un documento que el legado del rector Raúl Cárdenas Navarro -quien concluye su administración en pocos días-, será “funesto” por una política laboral de acoso y dirigida a los críticos de su administración, en la que se incluyen más de 40 académicos y empleados despedidos sin el debido proceso y los saldos financieros en pagos de prestaciones entre ellas el apoyo a familiares de fallecidos por la pandemia del covid-19 y agremiados en proceso de jubilación, lo que sumaría en total más de un millón de pesos.

De acuerdo con la postura de los agremiados de Economía, la Rectoría se ha valido de una alianza con la dirigencia sindical del SPUM para mutilar “aprovechando el confinamiento de los trabajadores a causa de la pandemia de coronavirus en 2020 y 2021, los contratos colectivos de trabajo para disminuir el derecho a la jubilación establecido desde 1939 en nuestra universidad; ha retenido salarios, secuestrado fondos sindicales y mantenido congeladas las prestaciones económicas a la planta laboral a lo largo de toda su penosa gestión y ha agredido a las casas del estudiante como pocos de sus antecesores lo habían hecho.”

En el caso del SUEUM, los saldos de parte de la Rectoría son de 80 millones de pesos, de acuerdo a fuentes consultadas en el gremio, aunque la administración universitaria arrastraba hasta hace meses un cúmulo de adeudos desde el año 2019, cuando por la resistencia al cambio en el Régimen de Jubilaciones y Pensiones, la política de Cárdenas Navarro fue contener el pago de las mismas y con ello inducir a sus agremiados a fortalecer otro sindicato, el de Trabajadores de la Universidad Michoacana (STUMICH), creado por expulsados del SUEUM, con la oferta de que con el cambio de filas se regularizaría su salario y prestaciones.

En el boletín que difunde este lunes la Rectoría, se indica que el convenio con la federación, “estipula presentar informes trimestrales de la aplicación del Nuevo Sistema de Jubilaciones y Pensiones, aprobado en el 2020, mismos que deberán contar por la Comisión Permanente de Presupuesto y Control del H. Consejo Universitario. Durante los últimos 4 años ha sido la constante, refiere de manera imprecisa la información, ya que los cambios al sistema de retiro en la UMSNH se plantearon a inicios del 2019 como parte de los compromisos asumidos en diciembre del 2018 por el ex rector Medardo Serna González y que le correspondió ejecutar a Cárdenas Navarro.

Otra parte en el comunicado, relativa a la política con los agremiados y personal académico, señala que se mantendrá “la supresión de las plazas de tiempo completo, medio tiempo o por asignaturas que sean incompatibles en horario con puestos directivos del personal que se encuentre laborando en los gobiernos federal, estatal y municipal o con plazas académicas y administrativas al interior de la propia institución.”

En el documento de la sección sindical de Economía, fechado el 22 de noviembre, se indica que en la gestión de Cárdenas, “sin validez legal”, han sido despedidos 20 académicos sindicalizados, además de 26 integrantes del Sindicato Único de Empleados (SUEUM). “El extremo de la tiranía universitaria de Cárdenas Navarro ha sido, sin embargo, la rescisión de contratos a los trabajadores sin previo aviso y sin seguir el debido proceso, que pasaría por tratar los casos en las comisiones mixtas de Conciliación y Resolución, violándose, en el caso de los trabajadores académicos, las cláusulas 108 y 109 del Contrato Colectivo de Trabajo”, plantea el documento.