Morelia, Mich.- El autodenominado “idiota”, José Antonio Romo Careaga, fotógrafo que con más de mil cámaras ha hecho la crónica de Morelia por más de 50 años, y el exmagistrado electoral, Leonel Castillo González, oriundo de Atapaneo para quien “los sueños no solo sueños son” (dándole así la vuelta a la histórica frase de Calderón de la Barca), fueron condecorados con la presea Generalísimo Morelos en el marco del aniversario 482 de la ciudad de Morelia.
José Antonio, un “idiota”
José Antonio salió de la Ciudad de México a temprana edad, contraviniendo las expectativas de su padre y con el deseo de encontrarse a sí mismo en el camino. A la larga eso lo convertiría, dice con un tono reivindicativo, en un “idiota”. Para el fotógrafo de las mil cámaras, un idiota es alguien que se atreve a cuestionar y pensar críticamente, disposición vital que nutrió a través de libros y fotografía, práctica ésta a partir de la cual aprendió “a ver el mundo” de una manera distinta y muy potente.
En su largo discurso relató que llegó a Morelia a los 18 años, ciudad que lo conquistó. La hizo de “comodín” o “chícharo” (persona a la que le encargaban distintas tareas no especializadas) en el Comité Administrador del Programa Federal de Construcción de Escuelas (Capfce). Un día le solicitaron, cuenta, revelar unas fotografías en un formato en el que nadie se las podía hacer, situación que lo movió a investigar el procedimiento y lo hizo por propia cuenta.
“Ese día decidí que no quería ser comodín. No sabía qué iba a ser, pero ese día me di cuenta de que había encontrado un oficio, un medio de vida, no el arte o lo que dicen que es arte”, repara.
Su postura contra los artistas es dura: “En todos los tiempos han estado al servicio del poder, de las ideologías, del mercado. Yo dije que ¡no a eso!”, pronunció en tono bravío frente a un auditorio repleto de priistas nuevos y viejos (desde Guillermo Valencia, actual presidente del Comité Estatal, hasta Fausto Vallejo, exgobernador de Michoacán), funcionarios de distintos niveles y áreas, empresarios y hasta el arzobispo Carlos Garfias.
En su trayectoria destaca la creación de la Asociación de Fotógrafos de Morelia y haber presidido la Asociación nacional. Su archivo fue un elemento importante –le reconocieron las autoridades– por el aporte que implicó para que Morelia fuera declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1991 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés). En 2002 fue designado con el entonces neologismo oficial “cronista fotográfico” por el Cabildo de Morelia.
Después de haber atravesado una complicada situación de salud en años recientes, actualmente está investigando las artesanías morelianas y la identidad propiamente moreliana a través de éstas, una tarea que le ha representado desafíos ya que, exclama, “¡no hay!”.
El condecorado cerró su discurso pidiendo a los legisladores, con un fondo musical de Alberto Cortez (“Castillos en el aire”), que “no hagan leyes contra los idiotas”.
Leonel Castillo, un exmagistrado ‘anticalderonista’
Por su parte, en su discurso de recepción de la condecoración, Leonel Castillo González dijo que su historia demuestra que “los sueños no solo sueños son”, frase con la que le da un giro a la famosa sentencia del dramaturgo español del siglo de oro, Pedro Calderón de la Barca.
Su ‘anticalderonismo literario’ está fundado en el hecho de que nació en la tenencia de Atapaneo en Morelia y llegó hasta la presidencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación entre 2005 y 2006, periodo en el que le tocó estar al frente de la validación de la elección que le daría la victoria a Felipe Calderón Hinojosa en medio de un proceso ampliamente cuestionado.
“Recibo este premio para que sea un estímulo para las nuevas generaciones. Que sepan que pueden vivir escasez económica y limitaciones, pero que, contrariamente a lo que dijo Calderón de la Barca, pueden hacer realidad sus sueños”.
Refirió también al filósofo español José Ortega y Gasset, para quien “un hombre es él y su circunstancia”, reflexión que le llevó a recibir la presea no solo a nombre propio (“no nos toca envanecernos por los propios méritos”), sino también a nombre de “las comunidades, las corporaciones y las personas” que le permitieron ir avanzando en su carrera.
Entre otros, destacó el agradecimiento a su madre, a los niños y adultos vecinos de Atapaneo, a la Universidad Michoacana y al Poder Judicial.
Condecoración sin registro al Poder Judicial
Al cierre de la sesión de Cabildo en el marco del aniversario 482 de Morelia, el presidente municipal Alfonso Martínez Alcázar condecoró también al Poder Judicial (no aclaró de qué orden).
Confesó que en esta ocasión ninguna institución se registró para el proceso, aunque existe la posibilidad de que lo hagan, y que la condecoración otorgada al exmagistrado Leonel Castillo era también, a través suyo, un reconocimiento al Poder Judicial. En el evento también estuvo presente Rita María Hernández Hernández, representante del Poder Judicial de Michoacán.
No asistió al evento Alfredo Ramírez Bedolla, gobernador de Michoacán. En su lugar estuvo Gladyz Butanda Macías, secretaria de Desarrollo Urbano y Movilidad del estado.
