Riesgo de continuar paros en la Secundaria Técnica 3, advierten docentes

La misma Secretaría de Educación estatal propicia irregularidades al no intervenir en un conflicto que rebasa los dos años, sostienen

La Secundaria Técnica 3 continúa inmersa en disputas intersindicales. | Agencia Comunicación Gráfica

Morelia, Mich.- Docentes de la Escuela Secundaria Técnica 3 “Álvaro Obregón”, advirtieron sobre la posibilidad de que continúen los paros de labores de una parte de la planta de maestros en apoyo a Xóchitl Hernández, de quien piden su reinstalación en el plantel y para lo cual en semanas anteriores pararon labores en prejuicio de los alumnos del plantel.

De acuerdo con los docentes, los paros no tienen justificación alguna y admitieron que en tanto la Secretaría de Educación del Estado (SEE) no intervenga en imponer para solucionar una problemática que rebasa los dos años, los riesgos de confrontación se mantienen en un conflicto donde ya se manipula a una parte de padres de familia a favor de directivos y dirigentes sindicales de la D-II-11 como la maestra Xóchitl Hernández, delegada en el plantel de la representación gremial adherida al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que han propiciado diversas irregularidades.

Entre éstas, citan que la directiva de paterfamilias sin derecho alguno impuso el cobro de 500 pesos con alumnos y para lo cual incluso utilizó en un oficio el escudo del gobierno estatal, recursos cuyo destino específico no se conoce ya que no se rinden informes sobre los mismos, para lo cual piden la intervención del Contraloría estatal.

También destacaron que con el concurso de un director anterior se habían mantenido interrupciones a labores docentes un día a la semana para realizar una kermés para obtener recursos que igualmente se mantienen sin reportarse en un informe financiero.

El involucramiento de la docente de quien se pide su reinstalación y por lo que una parte del plantel ha realizado los paros de labores, ha llegado al hostigamiento y cese de docentes que no están de acuerdo con la reinstalación que se demanda. En esta parte, indican, también se ha usado a la directiva de padres de familia afín a Hernández y que encabeza Virginia Tello, por lo que se hostigó a la odontóloga del plantel para intentar su remoción.

Desde hace más de dos años, el conflicto ha dividido en partes proporcionales a los docentes, donde un 50 por ciento apoya a Hernández y otra parte se pronuncia en sentido contrario, al acusar a la representante sindical de haber destrozado cámaras de vigilancia en un zafarrancho entre maestros y padres de familia en el 2022, donde también una parte de paterfamilias tuvo que intervenir para retirar a sus hijos de las aulas ante el temor de mayores alcances en la confrontación.

De la solicitud de maestros para que intervenga la autoridad, se dirigieron escritos tanto al propio gobernador Alfredo Ramírez Bedolla como a Yarabí Ávila González, la anterior titular en la SEE desde que iniciar al administración morenista en el gobierno estatal, como a Gabriela Molina Aguilar, actual secretaria de Educación, sin embargo, no se ha logrado nada, excepto en un momento la remoción de directores quienes sin embargo quedan en medio de los intereses al parecer demasiado consolidados en un conflicto que demanda una acción definitiva de la dependencia.

Insistieron en que la SEE debe aplicar una normativa “bastante clara” sobre paros y sanciones. De acuerdo a la Ley General de Educación, plantean los padres, “en su artículo 75 se establece que son infracciones de quienes prestan servicios educativos: Suspender el servicio educativo sin que medie motivo justificado, caso fortuito o fuerza mayor, además de suspender clases en días y horas no autorizados por el calendario escolar aplicable.”

La Ley de Educación estatal establece en su artículo 131, que “en días escolares, las horas de labor escolar se dedicarán a la orientación integral del educando, a través de la práctica docente, actividades educativas y otras que contribuyan a los principios, fines y criterios de la educación, conforme a lo previsto en los planes y programas de estudio aplicables”, y precisa que, “las actividades no previstas en los planes y programas de estudio, o bien la suspensión de clases, sólo podrán ser autorizadas por la autoridad que haya establecido o, en su caso, ajustado el correspondiente calendario escolar.”

Estas autorizaciones, de acuerdo al marco legal, “únicamente podrán concederse en casos extraordinarios y si no implican incumplimiento de los planes y programas ni, en su caso, del calendario señalado por la autoridad educativa federal. De presentarse interrupciones por caso extraordinario o fuerza mayor, la autoridad educativa estatal tomará las medidas para recuperar los días y horas perdidos.”

Según la versión de los maestros, a Xóchitl Hernández en días previos al inicio de los paros de labores, la misma fue cambiada de adscripción, pero en tres ocasiones ha sido rechazada por directivos de los mismos por sus antecedentes presuntamente conflictivo, motivo por el que reiniciaron las movilizaciones para demandar su reinstalación.

“La escuela se ha convertido en una tierra de nadie, sin imponerse la normatividad y ya llega a la intención de reprimir a los alumnos cuyos padres han mantenido una parte activa del lado de los maestros que no están de acuerdo con que se propicien enfrentamientos y situaciones de riesgo para los menores”, señalan los maestros, al destacar que este clima ha derivado en el surgimiento de una representación sindical alterna.