Con ausencias y traspiés, honores a Morelos en Morelia

No estuvieron presentes las principales autoridades locales, la biografía del Siervo de la Nación fue leída con tropiezos, un ciudadano se dijo molesto por la falta de respeto

El acto se llevó a cabo en la Casa Natal de Morelos. /Fotografía: Omar Ángel Chávez

Morelia, Mich.- Con la ausencia de las primeras autoridades del municipio y el estado, y con una biografía leída con marcados errores, esta mañana se rindió homenaje a José María Morelos y Pavón, quien hace 208 años fue acusado de traición al Rey y fue ejecutado en Ecatepec.

En el acto llevado a cabo en la Casa Natal de Morelos no estuvieron presentes ni el alcalde Alfonso Jesús Martínez Alcázar ni el secretario del Ayuntamiento, Yankel Alfredo Benítez Silva, quien comúnmente lo suple; en su representación asistió la contralora María del Carmen López Herrejón.

No hubo representación en absoluto por parte del gobierno del estado que encabeza Alfredo Ramírez Bedolla, tampoco del Congreso local ni del Poder Judicial, como coloquialmente sucede.

Fotografía: Omar Ángel Chávez

Previo a la colocación de la ofrenda floral, el maestro de ceremonias leyó una biografía del “Siervo de la Nación” que, luego de repetidos tropezones, movió incluso a las risas entre los integrantes de la guardia de honor.

En referencia a sus estudios, dijo que Morelos se formó en “gramática latínica”, que realizó estudios en la Real y “Pontíficia” (en lugar de Pontificia) Universidad, que fue “subdiacono” (subdiácono) y que en diferentes momentos de su recorrido por el país estuvo en “Tecpán” (Técpan) y “Cutzamalá” (Cutzamala”).

Cabe resaltar que se omitió la referencia a los Sentimientos de la nación promulgados por el “Generalísimo”, documento considerado de gran trascendencia en la historia política de México, pues ya proclamaba desde 1813 la independencia y soberanía de la América mexicana, la necesidad de un gobierno con representación popular y la prohibición de la esclavitud.

El profesor de canto Carlos Piñón, ciudadano de 83 años que asistió al evento por propia cuenta, se dijo enfáticamente molesto, calificando el evento como un “acto de relleno” y “desabrido”, así como una “falta de respeto” al prócer que dio nombre a la capital del estado.