Departamento de Justicia demanda a Texas por ley que permitiría a la policía detener a migrantes

Texas extiende alambrada en la frontera con México. | Fotografía: EFE

Austin, Texas.- El Departamento de Justicia federal demandó a Texas por una nueva ley estatal que permitiría a la policía detener a los migrantes que entren ilegalmente al territorio norteamericano, llevando de nuevo al gobernador republicano Greg Abbott ante los tribunales por sus medidas contra los migrantes que cruzan la frontera sur del país.

Según The Associated Press, Texas también está librando batallas judiciales por separado para mantener alambre de púas en la frontera y una barrera flotante en el río Bravo (o Grande).

Pero una ley que Abbott firmó el mes pasado plantea un desafío mayor y más amplio a la autoridad del gobierno federal en materia de inmigración.

Además de permitir a la policía de cualquier lugar de Texas detener a migrantes por cargos de ingreso ilegal, la ley — conocida como Iniciativa del Senado 4 (SB 4 por sus iniciales en inglés) — también otorga facultades a los jueces locales para ordenar a los migrantes que abandonen el país.

La demanda, interpuesta en un tribunal federal en Austin, solicita a la corte que declare inconstitucional la ley de Texas, argumentando que las leyes federales tienen primacía sobre las estatales.

“Texas no puede gestionar su propio sistema de inmigración”, afirma el Departamento de Justicia en la demanda. “Sus labores, mediante la SB 4, violan la autoridad exclusiva del gobierno federal para regular el ingreso y retiro de no ciudadanos, frustran las operaciones y procedimientos de inmigración de Estados Unidos, e interfieren con las relaciones exteriores de Estados Unidos”.

La ley está programada para entrar en vigor en marzo.

Grupos defensores de los derechos civiles y funcionarios del condado de El Paso, Texas, interpusieron el mes pasado una demanda que describe en términos similares a la nueva ley como una extralimitación inconstitucional.

El Departamento de Justicia le envió una carta a Abbott la semana pasada en la que amenazaba con emprender acciones legales a menos que Texas diera marcha atrás.

En respuesta, Abbott publicó en X que el gobierno federal “no sólo se niega a aplicar las leyes actuales de inmigración, sino que ahora quiere impedir que Texas aplique leyes contra la inmigración ilegal”.