Tras ataque contra un vehículo en Irak, EU confirma muerte de líder de Hezbolá

Vehículo atacado por un dron en el este de la capital iraquí, Bagdad, en el que murió un importante líder de la milicia proiraní Kataib Hezbolá, Abu Baqir al Saadi. | Fotografía: AFP

Washington, D.C.- El Mando Central de Estados Unidos (Centcom) confirmó que llevó a cabo un ataque selectivo con un dron contra un vehículo en el este de la capital iraquí, Bagdad, en el que murió un importante líder de la milicia proiraní Kataib Hezbolá, Abu Baqir al Saadi.

Según información de Europa Press, el impacto se produjo a las 21:30 horas “en respuesta a los ataques contra miembros del servicio estadunidense”, lo que provocó la muerte de un comandante de esta milicia, “responsable de planificar y participar directamente en ataques contra las fuerzas de Estados Unidos en la región”.

“No hay indicios de daños colaterales o víctimas civiles en este momento. Estados Unidos seguirá adoptando las medidas necesarias para proteger a nuestro pueblo. No dudaremos en responsabilizar a todos los que amenazan la seguridad de nuestras fuerzas”, aseguró el Centcom en un comunicado.

En el vehículo viajaban presuntamente otros dos pasajeros vinculados a las milicias de Resistencia Islámica de Irak. Kataib Hezbolá confirmó en un comunicado la muerte del comandante, según la agencia de noticias NINA.

La Célula de Medios de Seguridad de la oficina del primer ministro iraquí informó en la red social X que se inició una investigación sobre el impacto del dron, que provocó la quema del vehículo y la muerte de los pasajeros.

Según señalaron fuentes de seguridad al portal de noticias Shafaq, también fue atacado un almacén de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), una coalición que engloba a numerosas milicias proiraníes y de la que formaba parte Kataib Hezbolá; este ataque, por el momento, no ha sido confirmado por Washington.

Estados Unidos llevó a cabo el viernes una serie de bombardeos en Irak y Siria contra más de 85 posiciones vinculadas a la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria iraní y a milicias proiraníes que se saldaron con al menos 45 muertos, en respuesta a la muerte de tres militares estadunidenses tras un ataque perpetrado en Jordania por la milicia chií iraquí Kataib Hezbolá.