Trump gana en los ‘caucus’ de Nevada y se impone en los de las Islas Vírgenes de EU

Donald Trump, expresidente de Estados Unidos. | Fotografía: Archivo

Nevada, Estados Unidos.- El expresidente estadounidense Donald Trump consiguió una tan abrumadora como previsible victoria en los caucus de Nevada y ganó también en los celebrados en las Islas Vírgenes, donde ni siquiera tuvo que hacer campaña para triunfar entre los votantes republicanos.

Según EFE, Trump está muy cerca de hacerse con la nominación de su partido de cara a las elecciones presidenciales de noviembre después de sus éxitos rotundos en Iowa, Nuevo Hampshire, Nevada e Islas Vírgenes de EU.

El expresidente necesita mil 215 delegados para proclamarse oficialmente como candidato.

En el conocido como Estado Plateado, con tan solo un 1 por ciento de escrutinio, las proyecciones de medios como The New York Times o The Washington Post -equipados con tecnología para estimar resultados electorales- ya lo daban como ganador con un 97.6 por ciento de los sufragios, frente al 2.4 por ciento de Ryan Binkle, un pastor poco conocido afincado en Texas.

“Ustedes son la razón por la que voy a hacer América grande de nuevo. A lo largo de cada caza de brujas, redada, acusación y arresto, nunca te fuiste de mi lado. Siempre te amaré por eso. Soy la única persona que puede parar a Joe Biden”, afirmó Trump en un comunicado.

Por su parte, el territorio de las Islas Vírgenes de EU cayó de su lado, sin ni siquiera hacer campaña, obteniendo, al menos, un 75 por ciento de los apoyos en contraste con el 25 por ciento que cosechó la exembajadora de EU ante la ONU y exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley.

Resta por saber si la ejecutiva republicana a nivel nacional decide finalmente si en los ‘caucus’ de las Islas Vírgenes de EU se reparten nueve o cuatro delegados.

Sin embargo, Haley no pudo competir en los caucus de Nevada porque lo hizo este pasado martes en las primarias republicanas del mismo estado y su partido estableció que los candidatos debían elegir entre una u otra cita.

Una estrategia diseñada a la medida de Trump para afianzar su hegemonía dentro de la formación conservadora.

Y es que, durante décadas, Nevada celebró ‘caucus’ pero, como esas citas solían provocar cierto caos, los legisladores estatales aprobaron en 2021 una ley que abandonaba ese modelo de votación y establecía que las autoridades estatales debían organizar primarias cuando hubiera más de un aspirante.

Esa ley tenía un vacío legal porque no especificaba cómo el Partido Republicano asignaría al ganador los 26 delegados de Nevada que, tras presión del núcleo duro de Trump, acabó cediendo para repartirlos en los caucus.