Gobierno de EU sopesa medidas ejecutivas para frontera sur

Frontera México-Estados Unidos. | Fotografía: Archivo

Washington, D.C.- La Casa Blanca está considerando el uso de disposiciones de la ley federal de inmigración que fueron empleadas reiteradamente por el expresidente Donald Trump para promulgar de manera unilateral medidas estrictas en la frontera sur, según tres personas familiarizadas con las deliberaciones.

Según The Associated Press, el gobierno federal, bloqueado por los legisladores republicanos que rechazaron este mes un proyecto de ley fronteriza negociado entre ambos partidos, ha estado explorando opciones que el presidente Joe Biden podría desplegar por su cuenta sin la aprobación del Congreso, dijeron múltiples funcionarios y otras personas familiarizadas con las conversaciones.

El análisis del equipo de Biden sobre la posibilidad de implementar estas vías pone de manifiesto la presión que enfrenta el mandatario en materia migratoria y fronteriza en este año electoral, dos temas que han sido de sus mayores lastres políticos desde que asumió las riendas del gobierno. Por el momento, la Casa Blanca ha estado arremetiendo contra los legisladores republicanos por negarse a aprobar una iniciativa fronteriza que el Partido Republicano había exigido, pero el gobierno también está al tanto de los riesgos políticos que el elevado número de migrantes podría significar para el presidente, por lo que se apresura a intentar dilucidar cómo podría Biden resolver el problema por sí mismo.

Angelo Fernández Hernández, portavoz de la Casa Blanca, subrayó que “ninguna acción ejecutiva, sin importar lo agresiva que sea, puede brindar las reformas significativas de políticas y recursos adicionales que el Congreso puede proporcionar y que los republicanos rechazaron”.

“El gobierno pasó meses negociando de buena fe para presentar la iniciativa de seguridad fronteriza más justa y estricta en décadas, porque necesitamos que el Congreso realice reformas políticas significativas y proporcione fondos adicionales para reforzar nuestra frontera y corregir nuestro averiado sistema de inmigración”, declaró. “Los republicanos del Congreso optaron por la política partidista en lugar de nuestra seguridad nacional, rechazaron lo que los agentes fronterizos han dicho que necesitaban, y luego se dieron a sí mismos unas vacaciones de dos semanas”.

Las detenciones por cruces ilegales en la frontera sur cayeron 50 por ciento durante enero en comparación con máximos récord en diciembre, con lo que enero se ubicó en tercer sitio entre los meses con cifras más bajas de la presidencia de Biden.

Pero las autoridades temen que a la larga esos números vuelvan a subir, particularmente a medida que se acercan las elecciones presidenciales de noviembre.

La autoridad de inmigración que el gobierno ha estado estudiando se describe en la Sección 212(f) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que otorga al presidente un amplio margen de maniobra para bloquear la entrada de ciertos inmigrantes en Estados Unidos si fuera “perjudicial” para el interés nacional.