Dicen los candidatos que solo hay dos narrativas sobre las cuales se desarrollan los comicios del actual proceso electoral: o son elecciones seguras o no lo son. Quienes forman parte del regimen politico acentuan una realidad minimizada, es decir: sí hay regiones con violencia, pero no estan en riesgo las elecciones; por otro lado, la oposición abandera la idea de la imposibilidad en la que candidatos y ciudadanos se encuentran para ejercer su campaña y voto con plena libertad y sin constricciones de los grupos delincuenciales de México.
Ahora habremos de ser muy concientes de que ambas visiones politicas estan construidas desde el juego electoral, no son consistentes con la realidad, pues si no hubiera un riesgo real en el país como dice el regimen, no habria asesinatos de candidatos, mucho menos regiones en donde se imposibilita llevar las elecciones, entre Chiapas, Guerrero, Michoacán y Oaxaca puede darse en 14 distritos. Y por otro lado, si fuera el riesgo tan latente como lo dice la oposición, no se postularia candidatos con el proposito de no ponerlos en riesgo. Finalmente, debemos entender que lo que buscan ambas narrativas es acondicionar su campo politico.
24 han sido los atentados que han acabado con la vida de aquellos que aspiran a ser autoridades electas por la ciudadania en el proceso electoral del 2024. El crimen organizado elige antes que los ciudadanos a los candidatos y elige por encima de los partidos politicos a sus postulados. El crimen organizado lacera el valor sobre el cual se funda la democracia: la libertad.
Que falta de interes social tienen los partidos politicos y sus dirigentes, así como muchos gobernantes de posicionarse de uno u otro lado de la balanza. ¡le están arrebatando la vida a sus candidatos, están atentando contra la democracia en la que el pueblo elige libremente a sus gobernantes. Decir que no pasa nada es igual de absurdo, como decir que pasa todo y seguir como si nada. “Pidan seguridad” dicen nuestras instituciones, ¿y a los mexicanos que son los que toman la decision, quién los protege del agravio, quién los protege de los billetes, quién los protege de la despensa, quien los protege de la desinformación?
Sin libertad para decidir, no existe la democracia. Sin libertad para ejercer el derecho de ser votado, no existe la democracia. La democracia solo es en la misma propoción en la que la libertad del ciudadano se puede ejercer. Ya de por si la partidocracia atenta contra este valor político en la designacion ficticia y no abierta de elegir a sus candidatos, pero merma más cuando los grupos fácticos, las prácticas clientelares y la mercatocnia política constriñen al ciudadano, lo desinforman y revisten de mercancia a quienes no comprenden la responsabilidad pública del ejercicio de gobierno.
El grado de ausencia del Estado siempre es más evidente en la forma en que garantiza o no la pulcritud en sus procesos electorales. La sangre que se derrama en un Estado con base institucional termina constituyendo el fracaso del mismo, pero cuando la sangre se genera en el ejercicio del derecho electivo, el fracaso del Estado es también su declive democrático.
Eppur si muove
