Noruega, Irlanda y España reconocen un Estado palestino; se elevan las tensiones con Israel

Los palestinos llevan una lucha de varias décadas para establecer un Estado en Jerusalén Este, Cisjordania y la Franja de Gaza. | Fotografía: Getty Images

Tel Aviv, Israel.- Noruega, Irlanda y España anunciaron el miércoles el reconocimiento de un Estado palestino en una decisión histórica, aunque mayoritariamente simbólica, que aumenta el aislamiento de Israel tras más de siete meses de devastadora guerra contra Hamás en Gaza.

Según The Associated Press, los anuncios se produjeron luego de que el fiscal de la Corte Penal Internacional solicitó órdenes de detención contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y su ministro de Defensa, y mientras la Corte Internacional de Justicia estudiaba unas acusaciones de genocidio que Israel ha negado de forma categórica.

Los palestinos celebraron los reconocimientos como una afirmación de su lucha de varias décadas para establecer un Estado en Jerusalén Este, Cisjordania y la Franja de Gaza, territorios capturados por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967 y que todavía controla.

Israel retiró a sus embajadores en los tres países y convocó a sus respectivos enviados diplomáticos en el país, acusando a los europeos de recompensar al grupo insurgente Hamás por su letal asalto del 7 de octubre.

El gobierno de Netanyahu, que se opone a la creación de un Estado palestino, dijo que el conflicto solo puede resolverse mediante negociaciones directas, pero las últimas fracasaron hace más de 15 años.

Para subrayar este punto, el ministro israelí de Seguridad Nacional, el ultraderechista Itamar Ben-Gvir, realizó el miércoles una provocadora visita a un lugar sagrado tanto para judíos como para musulmanes, lo que podría elevar aún más las tensiones en la región.

Con el anuncio oficial de sus decisiones, previsto para el 28 de mayo, Oslo, Dublín y Madrid se unen a los alrededor de 140 países — más de dos tercios de los miembros de Naciones Unidas — que han reconocido ya un Estado palestino.

Estados Unidos y Reino Unido, entre otros, han respaldado la idea de un Estado palestino independiente que coexista con Israel, pero dicen que debe formar parte de un acuerdo negociado.

La comunidad internacional considera desde hace tiempo que la creación de un Estado palestino junto a Israel es la única forma realista de resolver el conflicto, y en las últimas semanas los países de la Unión Europea han indicado que planean reconocer un Estado palestino para impulsar esos esfuerzos.

El gobierno israelí condenó con contundencia la decisión adoptada por los tres países.

El ministro de Exteriores, Israel Katz, ordenó el regreso inmediato de sus embajadores y convocó a los enviados diplomáticos de los tres países en Israel.

El presidente palestino, Mahmud Abás, líder de la Autoridad Palestina que administra partes de la Cisjordania ocupada por Israel, celebró los pasos hacia el reconocimiento y dijo que contribuirían a los esfuerzos para alcanzar una solución de dos estados.

Hamás celebró también las medidas y pidió a otras naciones que “reconozcan nuestros derechos legítimos y apoyen la lucha de nuestro pueblo por la liberación y la independencia, y el fin de la ocupación sionista de nuestra tierra”.

Hamás, a quien Occidente e Israel consideran un grupo terrorista, no reconoce la existencia de Israel pero ha indicado que podría aceptar la creación de un estado según las fronteras de 1967, al menos de forma provisional.

Es poco probable que los anuncios del miércoles tengan algún impacto sobre el terreno. Israel se anexionó Jerusalén Este y considera que forma parte de su capital.

En la Cisjordania ocupada, ha levantado decenas de asentamientos judíos en los que ahora residen más de 500 mil israelíes. Los colonos tienen ciudadanía israelí, mientras que los tres millones de palestinos que viven allí lo hacen bajo un régimen militar israelí.

En Gaza, la guerra sigue su curso y Netanyahu ha afirmado que Israel mantendrá el control de la seguridad de forma indefinida incluso después de derrotar a Hamás.