Cuestiona reforma la Coalición en Defensa del Bachillerato en la UM

Docentes integrantes de academias en preparatorias insisten en que se aprobó de manera unilateral y sin una amplia consulta a los sectores involucrados

Fachada del Colegio de San Nicolás o Preparatoria 1 de la Universidad Michoacana.

Con la reserva de efectuar movilizaciones que podrían iniciar la siguiente semana, docentes y alumnos de la Universidad Michoacana integraron la Coalición en Defensa del Bachillerato luego que el Consejo Universitario aprobó este viernes reformas a la malla curricular que de acuerdo con sus impugnadores, lesiona el espíritu y naturaleza de la educación media superior a cargo de la Casa de Hidalgo.

En un manifiesto hecho circular en redes sociales, señalan que la malla curricular aprobada, “pretende otorgar un carácter técnico-laboral a las 7 preparatorias de la Institución, rompiendo con todo protocolo, simulando procedimientos y trasgrediendo normas sustentadas en el marco jurídico y Ley Orgánica de esta máxima casa de estudios en el Estado de Michoacán, así como de todo proceso democrático.”

Como lo cuestionaron desde que inició el proceso de reforma, en el 2019 y que transcurrió hasta mayo del 2021, según la propia Rectoría de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, no existen las condiciones para que la reforma se discuta de manera participativa y democrática, además de que consideran pone en riesgo la estabilidad laboral de los docentes del nivel e incluso se prevé, con el modelo propuesto por las autoridades, podría representar la desaparición del bachillerato nicolaita.

“Nuestro bachillerato enfrenta graves problemas provocados por el abandono de la autoridad en diferentes administraciones, la gran mayoría de los miembros de la comunidad universitaria somos conscientes de ello y hemos manifestado nuestra preocupación por resolver los más viables, entre ellos la actualización del vigente plan de estudios, pero mostramos un rechazo a las formas bajo las cuales se llevó a cabo la propuesta actual de reforma de la malla curricular del bachillerato que además obedece a intereses ajenos a la esencia académica nicolaita, y porque atenta contra los principios de la misma Universidad.

“Esta imposición pretende otorgar un carácter técnico-laboral a las 7 preparatorias de la Institución, rompiendo con todo protocolo, simulando procedimientos y trasgrediendo normas sustentadas en el marco jurídico y Ley Orgánica de esta máxima casa de estudios en el Estado de Michoacán, así como de todo proceso democrático.

“Además, cabe resaltar que el procedimiento para aprobarla es irregular, dado que se pretende realizar ante un consejo universitario ilegal en su conformación. ¿Por qué no se da prioridad a la legitimidad de la máxima autoridad de la UMSNH, iniciando con los procedimientos que establece el Reglamento de Elección de Consejeros Universitarios Profesores y Alumnos y, posteriormente, la toma de decisiones trascendentales en la vida universitaria?”, cuestiona el documento.

Tras manifestar que no se está en contra de las reformas, sino en las formas, el texto indica que “rechazamos que se haga por imposición de quienes carecen de argumentos, metodología y de compromiso educativo”, y enumeran que “no se hizo un diagnóstico integral, verídico y completo sobre el bachillerato”; insisten en que deben darse “condiciones óptimas de trabajo presencial, democrático y colaborativo (autoridades, profesores, estudiantes y padres de familia), con apego irrestricto a la normatividad”, y se pronuncian por impulsar un rediseño curricular “que realmente beneficie a nuestros alumnos, sin que esta pierda su humanismo y espíritu nicolaita, en los términos que se firmó el Plan de Mejora Continua en 2019.”

La reforma aprobada este viernes en sesión virtual del Consejo Universitario se dio por mayoría, no por unanimidad, con siete votos en contra y dos abstenciones. Desde el 2020, varios oficios se turnaron tanto al rector Raúl Cárdenas Navarro como al secretario académico Orepani García, solicitando una reunión con integrantes de las academias de bachillerato y consejos técnicos de las preparatorias para establecer bases de participación de los sectores universitarios, oficios que no tuvieron respuesta de los funcionarios.