Y hablaron las urnas, el domingo 6 de junio 2021 donde los ciudadanos le acotaron el poder al presidente que perdió la mayoría calificada en la Cámara de Diputados para poder reformar la Constitución y con ello la oposición conformada por el PRD, PRI y PAN le metieron freno a la 4T.
Aunque Morena y sus aliados tendrán mayoría simple para aprobar el presupuesto de la federación y con ello poder continuar implementando las obras y los programas sociales de López Obrador.
De esta forma la Cámara de Diputados quedaría para Morena con un mínimo de 265 con sus aliados y un máximo con 292; mientras que la Oposición tendrá un mínimo de 181 diputados y un máximo de 213 de acuerdo al conteo rápido del INE.
Pero como ya se dijo, Morena como partido gobernante no tendrá la mayoría calificada para llevar reformas constitucionales con lo que la oposición le amarra las manos a López Obrador para profundizar su “proyecto transformador”.
Los resultados de la votación a nivel de la diputación federal es un mensaje contundente de los ciudadanos contra el régimen autoritario de la 4T y establecer contrapesos en el régimen político mexicano dejando en claro que los ciudadanos prefieren un régimen político democrático a un régimen autoritario y unipersonal como el de AMLO.
Pero este resultado electoral también expresa el desgaste y el descontento de una buena parte de la ciudadanía a todos los errores del gobierno de Morena como la crisis económica, el mal manejo de la pandemia y sobre todo el aumento de la violencia y la inseguridad que golpea principalmente a los trabajadores.
Tal como lo apuntan las encuestas sobre el desempeño de López Obrador de su gobierno, aún tiene un alto grado de aceptación, pero en la mayoría de sus políticas está reprobado y es lo que se refleja en los resultados electorales del pasado domingo 6 de junio.
Aunque Morena ganó 11 gubernaturas y la de Campeche está en disputa, de todos modos el presidente sale perdiendo, tomando en cuenta que pierde el Estado de Nuevo León en manos de Movimiento Ciudadano, así como Chihuahua que lo gana el PAN.
Al nivel de las gubernaturas se puede afirmar que el triunfo en 11 entidades federativas relativamente para Morena y López Obrador significa un triunfo con sabor a derrota, y si se toma en cuenta que en los estados donde ganan las gubernaturas va tener Congresos Locales de oposición como el caso de Michoacán.
Otro golpe para Morena y el presidente es que perdió un número importante de alcaldías en la Ciudad de México, donde la oposición de acuerdo a los resultados preliminares ganaría 9 de 16 alcaldías algo nunca visto desde 1997.
Esta tendencia refleja el descontento ciudadano por el mal gobierno de Claudia Sheinbaum, una posible aspirante a la presidencia del país y que cuenta con el apoyo de López Obrador, pero con lo sucedido en la línea 12 del Metro y el pésimo manejo de la pandemia en la Ciudad de México hoy políticamente se derrumba, además de sus políticas represivas hacia el movimiento de las mujeres y la juventud, además del aumento de la violencia en la Ciudad de México.
De esta forma, el gobierno de López Obrador y su partido Morena, a pesar de ganar 11 gubernaturas de 15 en juego y 1 por definirse manifiesta una tendencia al declive una cuestión muy rápida para un gobierno de carácter populista en comparación con los gobiernos de América Latina de este tipo.
De esta forma, los ciudadanos han manifestado su voluntad en contra de las tendencias autoritarias y verticales del gobierno de López Obrador y su 4T, votando por los contrapesos políticos y en contra de la reconstrucción de un régimen político autoritario.
La 4T y el gobierno de López Obrador recibieron por parte de los electores un triunfo con sabor a derrota amarga y una tendencia decreciente del gobierno de López Obrador, allí están los resultados y las urnas hablaron a favor de la democracia y la pluralidad política.
