Morelia, Mich.- Habitantes del Ejido Santiaguito, inmerso en la mancha urbana de Morelia y que se localiza en los límites con Tarímbaro en la salida a Salamanca, iniciaron una marcha para manifestarse en contra del Plan de Desarrollo Urbano que pretende implementar el gobierno encabezado por Alfonso Martínez Alcázar y que a su juicio busca limitar su extensión.
Como ya lo habían manifestado semanas atrás, la pretensión del Ayuntamiento de Morelia afectaría a cerca de 13 mil familias en su patrimonio, ya que busca que se considere a la zona área de enajenación para ampliar el desarrollo urbano presuntamente a favor de particulares.
En rueda de prensa, el 24 de enero, señalaron que funcionarios del gobierno municipal de Morelia pretenden violar el cambio de uso de suelo con el que cuenta el lugar por instancias federales desde hace más de 10 años, de aplicarse el nuevo Plan de Desarrollo Urbano y que se dejaría en vulnerabilidad a más de 13 mil familias, porque se declaró esta zona como no habitable por el Instituto Municipal de Planeación, argumentaron.
En la movilización de este miércoles, los colonos señalan que durante la gestión del alcalde Salvador López Orduña, se acordó la cesión de una parte de terrenos ejidales para la creación de nuevos fraccionamientos en la zona, convenio que fue ratificado en el 2009 con el ya alcalde Fausto Vallejo Figueroa, y que permitió la construcción del Complejo Deportivo Bicentenario, el Auditorio y el Bosque Temático también en esta área, “todos construidos en hectáreas de donación del Ejido Santiaguito para poder formalizar la regularización de las colonias. El 20 de abril de 2009 se obtuvo la autorización de los planos de estas nuevas colonias y fueron incorporadas al municipio”.
Según los ejidatarios, Martínez Alcázar ha desconocido este acuerdo “y pretende impulsar una reforma al Plan de Desarrollo Urbano de Morelia 2010-2020, donde las colonias son legales y están reconocidas, a través del nuevo Proyecto Municipal de Desarrollo Urbano de Morelia 2022-2041 (PMSU), donde se declaran todas estas colonias como zona de riesgo por inundación, impidiendo así su consolidación como ´área de asentamiento urbano´ con acceso a todos los servicios públicos como agua, luz y drenaje”, plantean en un manifiesto.
Con la decisión del gobierno municipal, a su decir, se perderán 33 hectáreas de equipamientos deportivos y áreas verdes, “escasos en toda la zona norte de la ciudad, ya que esos terrenos volverían a ser propiedad del Ejido Santiaguito al no reconocer el convenio de permuta que permitió su donación” y que afectaría patrimonialmente a 13 mil familias, “que han puesto sus esfuerzos en las colonias creadas en los terrenos del Ejido Santiaguito y las miles de familias de las colonias del norte de la ciudad que se verán afectadas (…) debido a los intereses del alcalde Alfonso Martínez para apropiarse de terrenos y entregárselos a fraccionadores privados.”
