Morelia, Mich.- Un joven de 21 años de edad y cuenta con una discapacidad intelectual, fue detenido por elementos de la Guardia Civil, que lo encañonaron tres veces y en una ocasión uno de los elementos jaló gatillo, para amenazarlo con dispararle. Los hechos ocurrieron cuando el joven junto con su padre se dirigían a su casa por la tenencia Morelos en la colonia Socialista, denunció Aurora Martínez, madre del afectado.
Su esposo e hijo se dirigían a su casa luego de la jornada de trabajo que diariamente realizan en la tabiquera, sin que se advirtiera algo sospechoso o algún movimiento que pudiera poner en alerta a los elementos de seguridad pública.
“Traían unos trastes donde llevan la comida, un machete y un cuchillo para cortar su fruta”, era lo que llevaban en sus pertenencias, pero de manera abrupta fue interrumpido su tránsito a casa, por los elementos policiales.
“Ellos me lo amagaron con las armas, cortaron cartucho varias veces y se la pusieron en la cabecita, él se resistía porque al final es una persona con discapacidad, si se sienten agredidos no acatan ordenes, si les hablan con agresión, va a contestar con agresión el muchacho”, expuso.
Mencionó que venía de trabajar con su papá se dirigía a su casa, fue interceptado a las seis de la tarde, sin darles ningún motivo para ser detenidos, la patrulla se les colocó adelante y se bajaron, los sujetaron,
“Uno con palabras altisonantes se dirigió a mi esposo y a él, a mi propio hijo, nomas los separaron, a otro lo pusieron sobre la patrulla, y a él lo jalaron hacia allá, pero del cuello”, comentó.
El joven al describir los hechos lo hizo de manera confusa, solo logra referirse a un elemento policial que les pidió a sus dos compañeros que lo dejaran. “Un policía les dijo que me dejaran, les dijo que se callaran la boca, que le estaba diciendo algo, le dijo no te metas, le dijo vete para allá, y el que le estaba jalando la bala”, narró con dificultad el joven.
“Tenía más miedo que la pinche muerte, y con la pinche sangre caliente no lo aguanto”, dijo el joven, al señalar que si bien no les pidieron dinero, si generaron estrés y temor al muchacho, que no ha logrado dormir y se mantiene alerta y agresivo al ver policías, por lo que acudirán a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) para poner una queja.
