Tensión entre comerciantes y autoridades por reapertura de Andrés del Río

"Se echan la bolita entre ellos", acusan oferentes ante las explicaciones de uno y otro lado sobre el porqué no autorizan actividades

Entrega de apoyos, bajo presunta discrecionalidad. | Agencia Comunicación Gráfica

Morelia, Mich.- Algunos comerciantes de la calle Andrés del Río, quienes se instalaron en sus puestos por primera vez después del incendio que en días recientes afectó el mercado Independencia, reclaman entre gritos una inadecuada reapertura de la vialidad y mueven vallas instaladas por la Policía Morelia (PM).

Los oferentes del mercado inconformes reclamaron a las autoridades del ayuntamiento presentes no dejar entrar a los clientes por ese lado del mercado: “¿De qué sirve tener abierto, si la gente no puede pasar por aquí?”.

La calle amaneció con protecciones metálicas que reducían el tránsito peatonal sólo del lado de la banqueta de enfrente, donde algunos locatarios abrieron también por primera vez desde el siniestro, ya que la calle permanecía totalmente cerrada hasta ayer. No había acceso al inmueble por el lado poniente.

Visiblemente alterados, entre gritos, manoteos y ofensas, los comerciantes afectados reclamaron a los inspectores del ayuntamiento presentes la falta de acceso, derivado de lo cual se organizaron para mover las vallas por cuenta propia, contra la indicación emitida por las autoridades.

Rafael Camarillo Macías, inspector del ayuntamiento, dice que fueron Protección Civil estatal (PCE) y Fiscalía General del Estado (FGE) las que ordenaron esa estrategia de reapertura. Por su parte, los inconformes contestan que fueron estas mismas dependencias las que, minutos antes, les dieron permiso de abrir para facilitar el acceso a sus puestos, que son ellos (el ayuntamiento) los que no les permiten hacerlo.

“Se echan la bolita entre ellos”, grita uno de los comerciantes afectados.

En el momento de los intercambios no se encontraban ya elementos de las dependencias estatales referidas, solo autoridades municipales, quienes no pudieron contener la maniobra de los comerciantes.

Más de treinta minutos después se apersonó Fernando Guzmán, administrador del mercado. Entrevistado, asumió que fueron ellos quienes solicitaron a la Pm la instalación de vallas, aunque aclara que fue por instrucciones de PCE.

No se trata de un tema de riesgo por el estacionamiento a punto del colapso, explica, sino de que cuando inicien las labores de demolición y limpieza, debe haber paso libre para los vehículos, de modo que no se ponga en riesgo la seguridad de los visitantes.

Esto ocurre dos días después de que el interior del mercado fuera abierto, incluso los pasillos aledaños al estacionamiento que está a punto del colapso por el siniestro ocurrido la noche del sábado y la madrugada del domingo.

Hasta el momento de la redacción de esta nota, la calle permanece medianamente abierta, tal como la dejaron los comerciantes inconformes. Fernando Guzmán dice estar a la espera de las autoridades estatales para establecer una solución. Mientras tanto, la gente ya accede con comodidad por el lado poniente del inmueble.

Locales en Andrés del Río todavía sin solución

Sólo la mitad de la calle ha sido abierta. Comerciantes que rentan locales frente al estacionamiento a punto del colapso, obligados a tener sus cortinas metálicas abajo por las restricciones impuestas, exigen soluciones prontas, argumentando que hay zonas dentro del mercado que ya están laborando, aun cuando corren más riesgos que ellos.

“El estacionamiento se está cayendo hacia allá. Nosotros sentimos que corremos menos riesgos acá afuera y todavía no nos dejan abrir”, razonan.

Nadie se ha acercado a ellos para explicarles por qué unos sí abrieron ya y ellos no han podido hacerlo todavía, comentan.

Admiten que les preocupa su seguridad, pero las pérdidas que están teniendo también les están afectando significativamente.

Durante la trifulca con comerciantes del mercado, un inspector aseguró que se acababa de reportar un corto circuito entre los pasillos afectados, debido al calor que todavía permanece en el área del incendio. El humo sigue saliendo de la estructura del estacionamiento dañada.