Hijo de Gustavo Petro admite que dinero del narco entró a campaña de su papá

Gustavo y Nicolás Petro. (Foto: especial)

Bogotá, Colombia.- Nicolás Petro, hijo del presidente de Colombia, Gustavo Petro, admitió que el dinero de un condenado por narcotráfico entró a la campaña presidencial de su padre, en medio de un proceso de colaboración con la fiscalía que lo acusa de lavado de activos.

Según datos de Expansión, Nicolás “recibió altas sumas de dinero de parte del señor Samuel Santander López Sierra, conocido como el Hombre Marlboro” y condenado por narcotráfico en Estados Unidos, “una parte de estos dineros fueron utilizados por el mismo señor Nicolás Fernando Petro Burgos (…) y otra parte de estos fueron invertidos en la campaña presidencial del año 2022”, dijo el fiscal del caso, Mario Burgos, durante una audiencia judicial este jueves.

Nicolás Petro Burgos, de 37 años, fue capturado el sábado en la ciudad de Barranquilla junto con su exesposa Daysuris del Carmen Vásquez, quien en marzo aseguró que dos personas acusadas de tener vínculos con el narcotráfico le entregaron a su entonces cónyuge dinero en efectivo para apoyar la campaña presidencial del actual mandatario.

“Petro Burgos aportó información relevante que hasta el momento la Fiscalía General de la Nación la desconocía, entre ellos, (…) acerca de la financiación de la pasada campaña presidencial del actual presidente, doctor Gustavo Petro Urrego, y de los dineros que ingresaron a esa campaña”, dijo el fiscal Mario Burgos en una audiencia.

En la audiencia un juez definirá si envía al hijo del presidente a prisión mientras avanza una investigación en la que se le acusa de lavado de activos y enriquecimiento ilícito.

Según el fiscal Burgos, los dineros, al parecer, superaron los límites autorizados y una parte no habría sido reportada a las respectivas autoridades electorales.

Si bien Vásquez dijo que el presidente no estuvo al tanto de esa situación, el escándalo podría obstaculizar la búsqueda de acuerdos de paz y rendición del gobierno de Petro con los grupos armados, así como su ambiciosa agenda de reformas sociales.