Morelia, Mich.- Artistas dieron inicio a la restauración del memorial a periodistas desaparecidos, borrado en días recientes por la administración municipal de Alfonso Martínez.
El mural que será pintado es exactamente el mismo que el original, un homenaje a cuatro periodistas desaparecidos en Michoacán: Ramón Ángeles Zalpa y María Esther Aguilar Casimbe (corresponsales ambos de Cambio de Michoacán), así como Antonio García Apac y Mauricio Estrada.
La obra, que pudo ser vista durante un año en la Plaza de la Paz (en el límite norte del Centro Histórico de la ciudad), será colocada exactamente en el mismo muro que se encontraba, una de las exigencias de colectivos de periodistas ante el agravio del Ayuntamiento.
Las labores político-artísticas comenzaron el día de ayer por la noche y serán continuadas en el curso de los próximos días, con el objetivo de haber concluido hacia el final de esta semana; se espera que periodistas se sumen a las labores de restauración.
El memorial fue realizado originalmente con la intención de no olvidar la deuda del Estado con el gremio ante los riesgos que vive en Michoacán por ejercer su derecho de prensa y facilitar el derecho a la información de la ciudadanía.
Cabe recordar que, en la antesala de su segundo informe de gobierno, llevado a cabo en Ciudad Administrativa, el presidente municipal de Morelia, Alfonso Jesús Martínez Alcázar, mandó restaurar la colindante Plaza de la Paz, donde se encontraba también un memorial a mujeres víctimas de feminicidio, que igualmente fue borrado, para poner en su lugar caricaturas y el eslogan de su gobierno (“Morelia brilla”).
Las acciones habrían sido emprendidas con la finalidad de limpiar las paredes del “vandalismo” (expresiones urbanas) que se encontraba en las diferentes paredes de la Plaza, sin que el alcalde tuviera el cuidado –según sus propias palabras– de instruir a los trabajadores para que no dañar las obras.
Colectivos de periodistas y feministas protestaron ante el agravio, exigiendo una disculpa pública por parte del edil y la restauración inmediata de los murales con dinero de la administración municipal; por su parte, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) emitió medidas cautelares para tal efecto, escenario en el que Alfonso Martínez se habría visto obligado a cumplimentar las exigencias.
El rechazo también fue expresado por parte de la ciudadanía, que –según consta en un sondeo publicado por este medio– con “coraje”, “rabia” e “indignación” calificó de “incongruencia” o “hipocresía” las acciones del alcalde, que por un lado ha querido transmitir la imagen de “aliado” de las “causas justas” y, por otro, borra murales.
Es de mencionar que el mural de las mujeres víctimas de feminicidio lleva un proceso distinto al de los periodistas desaparecidos, por lo que todavía no se tiene claro cuándo ni cómo podría ser restaurado.
