Irán endurece multas contra mujeres que no usen hiyab: ONU acusa ‘apartheid de género’

Mujeres iraníes se unen para protestar en contra del riguroso código de vestimenta | Fotografía: Marie Claire

Teherán, Irán.- El Parlamento iraní aprobó la aplicación por un periodo de prueba de tres años de una nueva ley del velo que endurece las penas por la falta de uso de la prenda islámica, un texto que debe ser ratificado por el Consejo de los Guardianes para que entre en vigor.

De acuerdo con información de EFE, la “Ley de Apoyo a la Cultura de la Castidad y el Hiyab” fue ratificada por una pequeña comisión judicial y cultural a puerta cerrada a mediados de agosto y los diputados votaron hoy a favor de que se aplique por un periodo de prueba de tres años, informó la agencia Mizan.

La moción fue aprobada con 152 votos a favor, 34 en contra y siete abstenciones del total de 201 diputados presentes.

El texto legislativo debe ser ahora ratificado por el Consejo de los Guardianes, un organismo compuesto por 12 miembros, seis juristas y seis clérigos, que revisa la legislación adoptada por el Parlamento y tiene capacidad de veto sobre las decisiones del hemiciclo.

La ley busca poner fin a la falta de uso del velo en Irán, un gesto de desobediencia civil que han adoptado numerosas iraníes tras la muerte de Mahsa Amini tras ser detenida por la Policía de la moral por no llevar bien puesto el hijab en septiembre del año pasado.

Las penas no afectan solo a las mujeres que no se cubran, sino que además se castigará a mujeres y niñas que muestren en espacios públicos o en las redes sociales “desnudez de alguna parte del cuerpo o lleven ropa fina o ajustada”.

Expertos de la ONU han descrito la ley como “una forma de apartheid de género, ya que las autoridades parecen gobernar a través de una discriminación sistemática con la intención de someter a las mujeres y niñas”.

La ley ha sido aprobada solo cuatro días después del primer aniversario de la muerte de Amini, que se celebró en medio de enormes medidas de seguridad para evitar protestas como las que sacudieron el país el año pasado, en las que murieron 500 personas.