Morelia, Michoacán.- Las conversaciones entre los actores y los estudios de Hollywood se rompieron, acabando con cualquier esperanza de que la huelga de tres meses de los intérpretes pueda terminar pronto.
De acuerdo con información de Associated Press, los estudios anunciaron la suspensión de las negociaciones contractuales y apuntaron que las diferencias entre las dos partes eran demasiado grandes como para continuar con los contactos, a pesar de realizar una oferta similar a la que hace poco puso fin a la huelga de guionistas.
El sindicato de actores denunció las “tácticas intimidatorias” de su contraparte y dijo que estaban tergiversando sus ofertas.
El 2 de octubre, por primera vez desde el inicio de la huelga el pasado 14 de julio, el Sindicato de Actores de la Pantalla-Federación Estadounidense de Artistas de Televisión y Radio (SAG-AFTRA), reanudó las negociaciones con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP), que representa a los estudios, a los servicios de streaming y a las productoras en las negociaciones.
“Está claro que la brecha entre la AMPTP y SAG-AFTRA es demasiado grande y las conversaciones ya no nos llevan en una dirección productiva”, afirmó la AMPTP en un comunicado.
En una carta enviada a sus afiliados en la madrugada del jueves, SAG-AFTRA dijo que la cifra se había sobrevalorado en un 60 por ciento y apuntó que sus negociadores estaban “profundamente decepcionados” con la ruptura de las negociaciones por parte de los estudios.
Los estudios abandonaron la mesa de negociación tras ver la última propuesta de los actores el miércoles.
La propuesta de SAG-AFTRA tendría costo adicional de 800 millones de dólares anuales para las empresas y crearía “una carga económica insostenible”, añadió.
“Hemos negociado con ellos de buena fe (…) a pesar del hecho de que la semana pasada presentaron una oferta que, asombrosamente, valía menos de lo que propusieron antes de que comenzara la huelga”, explicó el sindicato en su carta.
Los actores se declararon en huelga por cuestiones que incluían la remuneración por la programación en streaming y el control del uso de su imagen generada por la inteligencia artificial.
