La importancia o relevancia de la salud mental dentro de nuestra sociedad ha ido aumentando a través de los años. Por lo general, las nuevas generaciones intentan priorizar este elemento un poco más que sus antecesores, por lo que resulta normal observar cómo buscan de una u otra manera lograr ese balance emocional que les permita realizar sus actividades cotidianas con total normalidad.
Para contextualizar, podríamos definir la salud mental como ese estado de balance psicológico y emocional, el cual tiene una influencia directa en el quehacer cotidiano del hombre, afectando así su toma de decisiones, los pensamientos que pasan por su mente y la relación que éstos tienen con la sociedad en general.
En este sentido, un elemento que puede ser clave dentro de la salud mental de muchos son las relaciones de pareja. Por una parte, esta puede terminar siendo un apoyo incondicional en la búsqueda de dicho balance emocional y a través de ella se puede encontrar diversión, amistad y experimentar cosas nuevas, tal cual puede hacerse en JOYclub, por ejemplo.
Aunque por otro lado, tu pareja puede llegar a transformarse en un factor de confusión y desestabilización mental muy importante.
¿Quieres saber más?, pues si te has sentido estresado y confuso sobre este tema tan importante, presta atención al siguiente artículo y toma nota.
¿Estoy en una relación tóxica?
Lo primero que hay que señalar es que cada relación de pareja es un mundo distinto, es decir, no existen fórmulas mágicas o explicaciones genéricas que encajen para todas las relaciones o situaciones.
Y esto es perfectamente normal, ya que cada persona es un individuo único e irrepetible. Siguiendo esta idea, una pareja al final termina siendo la suma de dos, por lo que la misma es una estructura mucho más compleja.
En este sentido, identificar si una relación es tóxica, así como también, saber qué hacer en este tipo de situaciones es un proceso que lleva tiempo y requiere sobre todo, voluntad de hacer las cosas bien, en especial, cuando se prioriza la importancia de una buena salud mental.
Ahora bien, aunque ya dijimos que la pareja por su composición es un mundo complejo y que estos procesos suelen tomar tiempo, aun así, se pueden identificar ciertos elementos que van a ser de gran ayuda para detectar si efectivamente te encuentras en una relación que te roba tu paz mental y no te permite desarrollarte como individuo o realizar tus actividades cotidianas con normalidad.
Eso sí, si observas que solo tienes alguno de ellos y en un grado menor, entonces es momento de actuar y tomar cartas en el asunto.
Pero si detectas más de uno de estos factores en la convivencia diaria con tu pareja, entonces deberías comenzar a replantear tus objetivos dentro de esa relación, establecer prioridades y expresar tus sentimientos referentes a lo que está sucediendo de una forma sana y responsable.
Estos son las 3 claves para reconocer si tu pareja es tóxica
Cualquiera de los puntos que se detallarán a continuación, pueden parecer obvios cuando se trata de una relación amorosa que no es la nuestra. En cambio, cuando hacemos referencia a nuestra propia pareja, a veces se torna difícil el análisis por la cantidad de sentimientos y emociones que hay involucradas.
De todas formas, tómate tu tiempo y reflexiona acerca de cada uno de los siguientes puntos:
1. Tu pareja ejerce un control excesivo sobre ti y sobre tu tiempo
Cada individuo debe mantener una vida que según sus códigos y gustos le resulte placentera, eso sí, dentro de los límites morales y legales aceptados por la sociedad.
Con esto en mente, si las acciones de tu pareja no permiten que te desenvuelvas de forma normal en tu vida, controla o intenta limitar tus actividades cotidianas, tus relaciones interpersonales e incluso tus hobbies, entonces tienes al lado a una persona que desea ejercer control sobre ti.
Por mucho que exprese que es por tu bien, una cosa es cuidar y proteger a un ser querido, y otra distinta es intentar controlarlo.
Una relación en donde un individuo permite que el otro tome el control de gran parte de su vida, terminará tarde o temprano llevando a la baja autoestima y a fuertes resentimientos.
2. Exceso de críticas y faltas de respeto
El amor es un sentimiento a veces difícil de explicar con palabras, pero uno de los elementos que más lo identifican es la admiración saludable hacia el otro.
En este sentido, tu pareja debería expresarte de una u otra forma su admiración hacia ti y viceversa. Ese reconocimiento del otro por quienes somos o por nuestros logros, es algo que cohesiona y fortalece la relación a corto y largo plazo.
Es por ello que cuando existe un exceso negativo de críticas, e incluso son acompañadas por faltas de respeto, ya no existe admiración y mucho menos respeto por la otra persona.
Este comportamiento afecta de manera muy negativa a la víctima, ya que queda expuesta y a merced de la manipulación de su pareja. Por su parte, esto puede llevar a padecer ansiedad, baja autoestima y depresión.
3. Celos incontrolables
Que nuestra pareja sienta celos en alguna ocasión, puede resultar para muchos algo tierno si se trata de un evento aislado y que no deje consecuencias negativas.
Pero si los celos se convierten en una conducta habitual y empiezan a interferir en tus actividades cotidianas o en tus relaciones interpersonales, ya se podría hablar de un problema mayor.
Lamentablemente, este tipo de inseguridades reflejadas en forma de celos, genera inconformidad, sensación de control y van socavando poco a poco la confianza y la comunicación de pareja.
Mi relación es tóxica, ¿qué debo hacer para cuidar mi salud mental?
Aunque cada caso es distinto, los primeros intentos para revertir esta situación deberían pasar por entablar una comunicación seria y responsable con la pareja. Priorizando por encima de todo tu balance emocional, ya que este es vital para el desenvolvimiento normal de tus actividades cotidianas.
Si esto no produjo resultados positivos y sientes que no puedes tomar una decisión tan compleja por tu cuenta, considera buscar una ayuda profesional que oriente tus emociones y pensamientos.
Ahora bien, sea cual sea la decisión a tomar, por muy complejo que sea el amor, ten siempre presente que una relación saludable debe basarse en el respeto y la confianza. La pareja debe ser un apoyo emocional, un refugio en los momentos necesarios que se interese por tu bienestar y tu salud mental, no lo contrario.
