Morelia, Mich.- Se ha trabajado de forma interinstitucional para que cantantes, payasos y “esta gente que es un poquito incómoda” respete a los visitantes que llegan a Morelia, declaró Thelma Aquique Arrieta, secretaria de Turismo municipal.
El fenómeno referido aumentaría “sobre todo cuando saben que hay gente (turistas)”, explicó, por lo que antes de la Semana Santa se llevaron a cabo dos reuniones para planear operativos, por ejemplo, para el día de la Procesión del Silencio, para los encendidos de catedral y los Viacrucis.
No se escaparon del señalamiento dos bares del Centro Histórico, cuyos nombres omitió a pregunta expresa, que a pesar de que se les habría solicitado comprensión a los fenómenos religioso-culturales, no han aceptado bajar el volumen de su música.
Las declaraciones se dieron en el marco del debate que surgió en Sinaloa, luego de que algunos turistas estadunidenses, quienes presenciaban un concierto de musica instrumental, se quejaran de la música popular que tocaba una banda a la orilla de la playa.
De ahí que, en cuanto al tema de la gentrificación -transformación de las zonas urbanas con base en las dinámicas de mercado-, comentara que se ha controlado a partir de la presunta regulación de las licencias.
Aseguró que no se han otorgado cambios de uso de suelo en las casas del Centro Histórico, a excepción de lo que permite el Instituto Municipap de Planeación (Implan), y agregó que “lo más difícil” de regular son los bares y antros.
Cabe recordar, sin embargo, que, según el Programa Parcial de Desarrollo Urbano, hace 22 años se estimaba que la población de esta zona era de 54 mil 819 habitamtes, y proyectaba cerca de 23 mil 280 para 2020; hoy, sin embargo, hay 18 mil 500, según la Gerencia del Centro Histórico.
