Morelia, Mich.- Antros y bares de Morelia reportan intentos de extorsión por parte de autoridades de seguridad estatales y federales, según el Ayuntamiento de Morelia.
Aunque se dijo a favor de resguardar el orden y la seguridad, el presidente municipal, Alfonso Jesús Martínez Alcázar, dijo considerar importante “levantar la voz” por estos presuntos abusos, en los que se les pediría a los empresarios pagar determinados montos a cambio de dejarlos funcionar sin clausura.
Esto, debido a que, en algunos de los 20 casos, los operativos han derivado en la clausura de los establecimientos, por la presunta identificación de sustancias con las características de la marihuana, la cocaína y las metanfetaminas, que podrían haber sido consumidas o vendidas en su interior.
Alfonso Martínez agregó que, en algunos casos, se ha reportado que los uniformados habrían quitado las memorias de las cámaras de seguridad para evitar dejar evidencia de las intervenciones, e incluso habrían presionado a los afluentes para borrar los videos tomados con dispositivos personales.
“Nos han buscado los empresarios con mucha preocupación. Estos operativos deben ser expuestos a la opinión pública, el que nada debe nada teme”, expresó
Aunque evitó mencionarlos, según información de la propia Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE), es ésta la institución que ha encabezado los operativos, con la ayuda de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional (GN) y la Comisión Nacional Antisecuestros (Conase).
Por su parte, Yankel Alfredo Benítez Silva, secretario del Ayuntamiento, dio a conocer que habría platicado al menos con tres empresarios, quienes no se decidieron a interponer una denuncia por temor a recibir represalias.
“He tenido pláticas con algunos de ellos, desean que el tema sea anónimo, están preocupados por la forma en que se dio, y tampoco están dispuestos a denunciarlo”.
Cabe señalar que el discurso de “levantar la voz por los ciudadanos” ha sido empujado por el alcalde de Morelia desde septiembre del año pasado, cuando dio a conocer que la Policía Morelia había levantado, hasta ese momento, 72 denuncias por presuntos abusos de elementos de la Guardia Civil de Michoacán –hoy 150, según información del Ayuntamiento–, que fueron acompañadas por una exigencia de depuración de la corporación estatal.
