Panamá, Panamá.- El derechista José Raúl Mulino asumió este 1 de julio la presidencia de Panamá con la promesa de frenar, con ayuda de Estados Unidos, el paso de migrantes por la peligrosa selva del Darién y reanimar la economía panameña dependiente del canal interoceánico.
Según AFP, Mulino llega al poder impulsado por la popularidad del controvertido expresidente Ricardo Martinelli, a quien reemplazó como candidato en los comicios del 5 de mayo por estar asilado desde marzo en la embajada de Nicaragua debido a una condena de casi 11 años por blanqueo de capitales.
Rebecca Bill Chávez, presidenta del centro de análisis Diálogo Interamericano, aseguró a AFP que “distanciarse” de Martinelli -sancionado por Estados Unidos por “corrupción”- y “su propuesta de cerrar el paso por el Darién” favorecerían la futura relación de Mulino con Washington.
En víspera de su investidura, Mulino se reunió con el secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, con quien firmará un convenio para repatriar migrantes que atraviesen la selva del Darién, fronteriza con Colombia.
Más de 200 mil personas, la gran mayoría venezolanos, han pasado en lo que va del año por el tapón del Darién, donde operan bandas criminales que secuestran, roban y violan a los migrantes; muchos mueren en esta inhóspita jungla.
Mulino releva a Laurentino Cortizo, del socialdemócrata Partido Revolucionario Democrático (PRD), de quien recibe un país con un déficit fiscal de 7.4 por ciento, una deuda pública de 50 mil millones y un sistema de seguridad social colapsado.
Tras su victoria electoral, adelantó que tomará decisiones “sin temor” para recuperar la bonanza económica del gobierno de su “amigo” Martinelli.
Deberá buscar con urgencia un proyecto para asegurar el suministro de agua en el canal de Panamá, motor de la economía (6 por ciento del PIB) que en el último año debió reducir el tránsito de buques por una sequía favorecida por el cambio climático.
Mulino gobernará con un Congreso (71 escaños) en el que los independientes son la primera fuerza, pero su partido Realizando Metas (RM), fundado por Martinelli, controla la junta directiva y sus 13 diputados podrían dominar el parlamento en alianza con partidos tradicionales.
