La ACI destaca que en muchos países se observa a las cooperativas agrícolas trabajando la tierra mediante prácticas sostenibles. También, las cooperativas de consumidores apoyan cada vez más las fuentes de abastecimiento sostenible de sus productos y educan a los consumidores sobre el consumo responsable. En tanto, las cooperativas de vivienda ayudan a garantizar viviendas seguras y asequibles.