Conocimiento ancestral…

El lago de Cuitzeo existe desde el Pleistoceno, es decir 2.59 millones de años. (Foto: especial)

Sueño de una noche de verano (A Midsummer Night’s Dream) comedia escrita por William Shakespeare, alrededor de 1595, narra los hechos que suceden durante el casamiento de Teseo, duque de Atenas, con Hipólita, reina de las amazonas. Incluye las aventuras de cuatro amantes atenienses y un grupo de seis actores aficionados que son controlados por las hadas que habitan en el bosque donde transcurre la mayor parte de la obra.

Si bien es conocida con el nombre Sueño de una noche de verano, podría referírsele también como Sueño de una Noche de San Juan, ya que la tradición- celebración- de origen celta fue producto del sincretismo convirtiéndose en la noche de San Juan. La trama ocurrida en Midsummer Night Dream es sobre lo sucedido en la media noche de un 24 de junio, la cual en muchas ocasiones coincide con el solsticio de verano.

Shakespeare nos remonta a un mundo fantástico donde las hadas y el amor existen. Todo sucede en un espeso bosque, donde el mundo de las hadas se entrelaza con el de los humanos.

Justamente en una noche como la de hoy, sucedió todo lo que Shakespeare escribió, inspirado en las leyendas, sobre todo Celtas, en las cuales se hace saber del finísimo hilo que hay entre la realidad y lo imaginario.

En la cultura celta, los druidas celebraban el «Alban Heruin» en el solsticio de verano, un ritual en el que se encendían grandes hogueras buscando la bendición para sus tierras y los frutos que debían dar, así como los buenos augurios para los enamorados y la fertilidad de las mujeres.

Se sabía de “puertas” a otros mundos y dimensiones. La humanidad en ese entonces no se creía todo poderosa, sino conocía y respetaba la interdependencia entre la naturaleza y nosotros los humanos.

La interdependencia también entre lo que consideramos real y lo que “no se ve”, pero que por no verlo no existe.

Nos muestra el conocimiento ancestral, que no por no ver algo deja de existir. O el hecho de por no creer en algo no existe.

La noche de San Juan está llena de magia, de rituales ancestrales, que, en la profundidad de los bosques, sobre todo europeos aún se realizan.

La hora mágica son las doce de la noche, el momento de sumarse al ritual de la depuración por medio del fuego. Según la tradición, ha de echarse a la hoguera algo viejo o un papel donde hayamos escrito todo lo que nos gustaría cambiar. Mientras se quema en las llamas, se dan tres saltos seguidos sobre la hoguera.

El emperador bizantino Teodosio se empeñó en perseguir a todos aquellos que practicaban los cultos paganos cuando, en el siglo IV, declaró el cristianismo como religión oficial del Imperio Romano de Oriente y Occidente, en el «Edicto de Tesalónica». Lo que no llegaría a saber el Emperador es que su decreto no sería del todo consolidado por sus aliados cristianos. Gran parte de las festividades religiosas que celebramos hoy en día contienen un origen pagano. Por mucho ahínco que Teodosio y sus descendientes pusieran en acabar con los rituales que consideraban herejes, la realidad es que estos acabaron por formar parte de la cultura no solo cristiana, sino de la humanidad.

El conocimiento ancestral sabía de la fragilidad del hilo entre la vida y la muerte, entre la fantasía y la realidad. Sabían que solo el respeto a la madre tierra y todos los seres serán garantía no solo de prosperidad sino de continuidad de la vida.

Estos conocimientos (no beneficiosos al poder), fueron echados al olvido intencionalmente, no hay otra manera de entender porque se han asesinado tantas especies de fauna y flora, tantos millones de humanos, porque se han echado a la hoguera libros, papiros y códices plenos de sabiduría.

Hay un control sobre lo que el poder quiere que sepamos, y no sepamos.   Sin embargo, afortunadamente hay medios responsables que publican no obstante no sea del agrado del poder.

Así nos enteramos, el lunes pasado, de que Turquía, país que está a 11,779 kms de distancia, está preocupado por la desecación del lago de Cuitzeo.

El gobierno federal está a 350 kilómetros, y nada ha hecho desde hace años, para evitar este ecocidio. Lo mismo sucede con los gobiernos estatales que están a menos de 100 kms de ese lago, que era uno de los más grandes del planeta.

Desde hace más de una década, lo hemos venido diciendo mediante este medio, ante el COEECO y como miembro de este organismo ciudadano, ante el Congreso Estatal y Federal. También ante todas las instituciones relacionadas y “responsables” de este tema.

La desecación tiene varias causas, pero la principal es la enorme e irracional deforestación.  Muchos dicen que es por el cambio climático. ¿Pero porque es el cambio climático?, por la enorme contaminación. Por no haber árboles, bosques, no hay aire puro, no hay corrientes de viento que limpien, no hay suelos receptores de agua, que ayuden a la formación y alimentación de mantos freáticos.

Otra causa es: la excesiva extracción del vital líquido a grandes profundidades, causando desviación de las corrientes, socavones, y la desecación de la tierra.

México era riquísimo en biodiversidad, Michoacán era uno de los lugares del planeta que tenía más especies de árboles y preciosos ríos, lagos y mares.

Los acuíferos del mundo al igual que los árboles y plantas están todas interconectadas. Lo que sucede en Michoacán, Chihuahua etc. afecta al mundo entero.

La cascada de Basaseachi en Chihuahua, mejor conocida como “salto del ángel”, es la más grande del mundo.  De extrema belleza, pero sobre todo vela por los Rarámuris que habitan desde tiempos inmemoriales en la región. Gracias a su agua, se tenían buenas cosechas, alimentación y agua limpia.

Hoy está prácticamente seca. Las causas son; por un lado, la falta de lluvias, pero sobre todo el que hay dos minas que están desviando el agua de los mantos freáticos y corrientes que alimentan a la cascada, para su uso y beneficio. Resultado de tal ecocidio; las comunidades están sin agua y la tierra sin vida. Las comunidades han denunciado en reiteradas ocasiones que la Mina Concheño y Pinos altos, han desviado el cauce natural del río para abastecerse de agua, sin que las instancias correspondientes a nivel estatal y federal hagan algo al respecto.

Recordemos el derrame de 3.000 litros de ácido sulfúrico al Mar de Cortés, una zona de enorme riqueza biológica, realizado por la minera del grupo México, principal conglomerado minero del país y dueño de estas instalaciones ubicadas en Guaymas, en Sonora. Hace casi cinco años, esta empresa fue responsable del vertido de 40.000 metros cúbicos de metales tóxicos en un río de la misma región, el mayor desastre natural en la historia de México.

La experta en agua de la Universidad Nacional Autónoma de México, Elena Burns, no duda en considerarlo “un crimen ambiental”. “Son sustancias que envenenan la fauna marina”, asegura. Existe “una afectación clara” sobre los peces y algas marina.

El lago de Cuitzeo existe desde el Pleistoceno, es decir 2.59 millones de años. Algunas de sus contribuciones fundamentales en el presente son: la regulación del clima de la cuenca, sustento y hábitat a diversas especies vegetales y animales y contribución a la economía local. La cuenca hidrológica del lago de Cuitzeo cubre un área de 426 km².​ Se alimenta principalmente del río Grande de Morelia, que desemboca en el lago en un humedal cerca del poblado de Felipe Carrillo Puerto (municipio de Álvaro Obregón.).  Como comento, lagos, ríos y mares están interconectados.

El lago de Cuitzeo es alimentado también por la Mintzita, por los mantos freáticos ubicados en el área conocida como Arcos de la Cascada, al sur de Morelia, junto al arroyo Loma Larga, conectado al rio grande, conectado a la Mintzita, conectado a Cuitzeo. Los bosques de esta área del sur de Morelia han sido víctimas de las inmobiliarias y de personas sin escrúpulos, que los han talado y vendido “por su gran belleza”, dejando solo tierras encementadas y la enorme biodiversidad muerta.

En síntesis; Morelia esta por quedarse sin agua. Está rodeada de cerros, que han sido víctimas de la deforestación. Por lo tanto, se acaban los mantos freáticos, se acaba también Cuitzeo.

Cuenta la leyenda que había una gran laguna que abrazaba con sus aguas un corazón. Era la laguna que fue llamada Cuitzeo.