Recapitulando…

Conocido como «Pok-ta-pok» por los mayas y “Tlachtli” por los nahuas, el juego de pelota tuvo un carácter sagrado. (Foto: especial)

Este año me ha parecido como un minuto. Se ha ido como el agua, pensé al ver que tan solo faltan dos días para que termine.

Ha sido un año lleno de sucesos que parecieran increíbles. Lo cierto es que estamos viviendo tiempos maravillosos.

La humanidad, la mente humana, evoluciona cada segundo, a la par, pareciera que involucionase. Hay actos maravillosos como el ver acciones a favor de la igualdad y la libertad, así como actos de barbarie; como talar cientos de hectáreas de una selva, productora de oxígeno y agua vital para el planeta y todo ser vivo.

Han pasado tantas cosas durante las últimas semanas, que es difícil mencionar todo. Algo en que todos los ojos estuvieron puestos; fue el mundial de futbol.

A semejanza del juego de pelota maya, se invocaba a los Dioses, se les rendía culto, y se mostraba la grandeza y pequeñez del espíritu humano.

Ver los equipos de países que han tenido que remontar guerras, y todo tipo de obstáculos, llegar a donde nadie hubiera creído llegarían. Fue maravilloso ver a Croacia, a Marruecos, mostrando no solo que saben jugar, sino que ponen todo para salir adelante.

Y ver por otro lado la incongruencia de los países colonialistas como Inglaterra, Francia, que desprecian a los migrantes en su mayoría africanos, pero que no ganarían sin ellos.

Fue muy interesante ver todo el movimiento que había en el mundial, los intereses económicos y políticos, pero sobre todo constate que el mundo tiene que cambiar. Que está cambiando.

Observando el juego, se constata que  el juego de pelota contiene un hondo significado, originario de tiempos ancestrales. Recordemos que desde hace 3,000 años el juego de pelota fue parte fundamental de la vida social de todos los pueblos mesoamericanos.

Conocido como «Pok-ta-pok» por los mayas y “Tlachtli” por los nahuas, el juego de pelota tuvo un carácter sagrado. Era un rito para propiciar el movimiento de los astros en el cielo, gracias a que los jugadores y la pelota que representaban los astros contribuían a la victoria del sol sobre la noche.

El mundial termino el 18 de este mes, cerca de las llamadas fiestas Saturnales, que los romanos dedicaban a Saturno, dios de la agricultura, dándole gracias por las cosechas, y las cuales originalmente transcurrían del 17 al 23 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno.

 Durante el solsticio se celebraba el renacimiento de la luz, que en el calendario juliano (que rigió al imperio y a Europa durante siglos) se celebraba, curiosamente, el 25 de diciembre.

Para la cultura celta Los solsticios de invierno eran considerados como la renovación de una nueva época y también el florecimiento del espíritu y de las deidades, y era denominado Yule.

 Como podemos ver con estos ejemplos, la humanidad es una. Por más que nos quieren hacer creer que somos diferentes.

 Esas fechas para los mexicanos, son igualmente de enorme importancia. Empezando el 12 de diciembre con la conmemoración de la aparición de Tonantzin, nuestra madre, a la que los españoles llamaron virgen de Guadalupe.

Ese día millones de mexicanos, caminan vías sagradas, guiados por el conocimiento ancestral que llevamos cada uno de nosotros, en la sangre.  Para llevarle flores, cantos, danzas, aflicciones, tristezas y alegrías.

Este mes ha estado lleno de acontecimientos; el intento de asesinato de Ciro Gómez Leyva. Acto sumamente grave, ya que está claro el mensaje de silenciar lo non grato, a intereses políticos y económicos.

La importancia de recordar el significado del triunfo de la luz, sobre la oscuridad, es fundamental para comprender la vida y enseñanzas de Jesús de Nazaret, cuyo nacimiento es conmemorado en todo el orbe.

La humanidad toda anhela tener vida plena, no más injusticias, no más explotación irracional de los recursos naturales, no más miseria.

Los intereses económicos y políticos intentan ocultar y /o minimizar los esfuerzos, que unidos hemos de lograr para hacer realidad el cambio anhelado.

El lunes 19 del presente mes, en la Cumbre de biodiversidad COP 15 en Montreal, 190 países, firmaron un pacto para poner en acción medidas destinadas a salvar las tierras, los océanos, las especies de la tierra, de la contaminación, de la degradación y la crisis climática. Es un plan para intentar limitar el calentamiento global a 1.5 grados centígrados, según el acuerdo de Paris. Se pretende asegurar el 30% del planeta tierra como zona protegida, para el 2030. Según los científicos, ese 30% es el mínimo, para detener la extinción masiva.

El acuerdo incluye, aportar 30.000 millones de dólares, de ayuda anual para la conservación para los países en vías de desarrollo, así como salvaguardar los derechos de los pueblos indígenas, como administradores de sus tierras, una demanda de los activistas.

Al leer esto, pensé en el ecocidio que está sufriendo la selva, los acuíferos, los manglares, los ríos, el mar, los ecosistemas a causa de la construcción del tren maya.

Pensé en los asesinatos, desapariciones de periodistas y personas que defienden a la naturaleza: al planeta; a la vida.

Recordé como el jueves 15 del presente, intentaron asesinar a Ciro Gómez Leyva, dejando claro que quieren silenciar las voces non gratas a los intereses económicos y políticos en el poder.

México se ha convertido en el país más mortífero para los medioambientalistas en el mundo. Las últimas cifras globales han llevado al país a la cabeza de los homicidios de ambientalistas, con un número que no ha parado de escalar en los últimos tres años. El nuevo informe de la organización internacional Global Witness, que realiza un conteo anual de estos crímenes, señala que 54 personas que defendían su ambiente, recursos naturales o tierra, fueron asesinadas durante el 2021.

De acuerdo con el documento, casi la mitad de los que perdieron la vida el año pasado eran indígenas y más de un tercio están considerados como casos de desapariciones forzosas.

Latinoamérica ha sido durante años la región más peligrosa para el activismo medioambiental: la organización documentó el asesinato de 1.733 activistas durante la última década y el 68% tuvieron lugar en América Latina. México se había posicionado en la lista de los lugares más mortíferos,  hasta ahora siempre había estado por debajo de países como Brasil o Colombia. Sin embargo, la violencia ejercida contra los activistas el año pasado llevó al país al peor lugar. “Se ha convertido rápidamente en los últimos diez años en uno de los lugares más peligrosos para los defensores de la tierra y el medio ambiente, con 154 casos documentados durante este período”, dice el informe. La mayoría, unos 131 homicidios, ocurrieron entre 2017 y 2021.

El cambio climático existe, y lo ha causado el hombre. Siendo más explícitos lo ha causado el sistema económico que rige al mundo. Se intenta silenciar las voces de periodistas, de ambientalistas, pero no se puede ocultar la verdad eternamente.

Al escribir este, recordé que el 28 de diciembre es llamado “día de los inocentes”. A mi mente vinieron recuerdos de cuando era niña; ese día los periódicos publicaban una portada falsa, en la cual se publicaban noticias que todo mundo anhelaba.

Por un instante imagine que dirían las portadas este año; “la selva del sureste mexicano ha sido designada Zona Protegida, no se permitirá la construcción del tren Maya, ni el despojo a las comunidades”.

Otra portada más diría: “Se ha acabado la violencia y la inseguridad en México”, y otra diría; “Todos los que han robado a la nación, han sido aprehendidos y se ha devuelto lo robado a las arcas.”

Se está acabando 2022, reflexionemos y gradezcamos lo vivido, lo aprendido, y hagamos todos nuestro mayor esfuerzo, para lograr que el 2023, sea un año en que se cumplan los anhelos de la humanidad; de justicia, igualdad, libertad y de una vida plena.

Reciban todos un gran abrazo, con mis mejores deseos para ustedes, y sus seres queridos.