SINDICALISMO CRÍTICO NICOLAITA: En la recta final de la designación de la o el rector 2023-2027 en la UMSNH

Edificio de rectoría de la UMSNH. (Foto: especial)

De acuerdo con el Artículo 21 de la Ley Orgánica de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), para ser Rector se requiere:

I. Ser mexicano por nacimiento;

II. Tener más de treinta años de edad;

III. Poseer título o grado académico equivalente o superior al de licenciatura; y

IV. Haber desempeñado actividades docentes o de investigación en la Universidad, por lo menos durante cinco años, y estar en ejercicio en el momento de su designación.

En las últimas designaciones de rector se ha considerado con mayor importancia que quien dirige a la UMSNH tenga la mayor habilitación académica, esto es, que posea grado de Doctorado, asimismo, se considera importante la productividad científica de los prospectos, quizá esto debido a que estas cualidades permiten que las Universidades Públicas Estatales accedan a mayores recursos económicos y qué mejor que los propios investigadores, quienes mantienen en buena posición a la UMSNH en los ranking académicos, para definir estrategias para mantenerla o mejorar su posición en esos listados.

Los universitarios nicolaitas señalan en diversos chats que varios de los aspirantes carecen de las cualidades anteriormente referidas en lo académico y en el servicio docente, poseer la máxima habilitación académica y tener una alta productividad en el plano científico deberá ser pues ponderado altamente para elegir o designar a quien encabece una Universidad. Sin embargo, en esta semana el medio preferido de las autoridades en turno, hizo pública una lista de supuestos “finalistas” a la carrera por la Rectoría y además, una gráfica de barras hecha expresamente para resaltar el hecho de que uno de los candidatos de Raúl Cárdenas Navarro y Silvia Hernández Capi, el actual tesorero de la UMSNH, Rodrigo Gómez Monge, tenía más de un curso de maestría y de doctorado, dando a entender con esto que “tiene ventaja” en su grado de habilitación.

Lo anterior sería un punto a su favor si los universitarios nicolaitas no supieran cómo se ha desempeñado en esta administración, si se desconociera que aquello que la autoridad universitaria maneja como “ahorros”, seguramente fueron “estrategias” de manejo de los recursos ideadas por el tesorero, y en realidad se han “tomado prestadas” de manera indebida las cuotas sindicales, aplicado los descuentos de la caja de ahorro sin reintegrar los ahorros y rendimientos a las y los profesores, se debe gran cantidad de pagos a los deudos de los académicos fallecidos y a los jubilados.

Por otra parte, los universitarios se preguntan en diversos chats, cómo es que integrantes de la administración actual aparecen como aspirantes sin haberse separado de sus cargos previamente, a excepción del ex–Secretario Académico de la UMSNH, que se dice, fue separado en cuanto manifestó su deseo de contender por la Rectoría y no apoyar al actual tesorero para ese puesto. Ni Pedro Mata, ni Héctor Pérez Pintor (que se dice, es apoyado por Jaime Hernández), ni Silvia Hernández Capi o el tesorero, han dejado sus cargos y seguramente persisten en su aspiración “para ver qué les toca” (como se dice, es el caso de la Directora de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales), como muchas veces se ha visto en las contiendas.

Sin embargo, el estigma de ser parte del aún peor rectorado de la historia reciente de la Universidad y artífices, tanto el secretario general, como la decretaria administrativa, de los despidos injustificados, las irregularidades en las que se incurrió en el Consejo Universitario durante la pandemia, la mala aplicación de la regularización de materias y el daño patrimonial que se generará por la reinstalación, entre otros, debían ser motivos suficientes para descartar a estos personajes por su incapacidad, pésima administración e ilegalidades.

Los universitarios, también señalan en diversos chats que quien ocupe la Rectoría debe ser necesariamente nicolaita, es decir, que no sólo labore en la institución, sino que haya cursado estudios en las aulas de la Máxima Casa de Estudio de Michoacán. Así, hay una candidata no nicoliata que está siendo impulsada por las amigas de la esposa del Gobernador y por uno de los integrantes de la Comisión de Rectoría, ex – Presidente Municipal de Morelia, por la conveniencia de consolidar la plaza de Profesora e Investigadora Asociada “C”, que indebidamente, por sus favores en lo sindical, le fue otorgada por Raúl Cárdenas y Silvia Hernández Capi, a su hija, sin que esta no sólo no tuviera la carga académica necesaria para ello, sino que ha demostrado falta de compromiso con la dependencia universitaria donde se la asignaron, al pasársela de permiso.

De todo lo anterior, es muy importante resaltar que las y los aspirantes anteriormente mencionados han demostrado una total falta de compromiso con la comunidad universitaria, pues a decir de una publicación “cumplieron” con haber sostenido reuniones con miembros del Consejo Universitario; presentar sus planes de trabajo,¡sólo a la Comisión de Rectoría!; asimismo, con el cabildeo ante los miembros de este último órgano, lamentablemente sin asegurar que ese cabildeo tenga como finalidad el bien de la institución y su comunidad, pues como se mencionó, hay integrantes de la Comisión de Rectoría que tienen muy definidos sus intereses personales y tomarán su decisión en el sentido que mejor les permita mantener su coto de poder en lo institucional y lo sindical (como lo ilustra el caso de Salvador Galván Infante y la plaza otorgada de manera irregular a su hija).

Por lo anterior es importante recordarle a los integrantes de ese órgano, que su decisión debe favorecer a la institución y a la comunidad y que ellos consintieron las arbitrariedades de Raúl Cárdenas Navarro en lo ilegal, en la violación de los derechos humanos y laborales de las y los trabajadores académicos, administrativos y manuales y el trato indigno a los mismos.

Hasta el momento, los únicos aspirantes que han reconocido públicamente la problemática de los trabajadores y han mencionado la necesidad de reestablecer el diálogo entre las facciones y grupos de universitarios como condición para favorecer el desarrollo de las actividades sustantivas de la UMSNH han sido el doctor Guillermo Salas Razo, quien no sólo lo enuncia en su Plan de Trabajo, sino que tiene un propuesta para que las reinstalaciones no signifiquen un daño patrimonial grave a la institución; la doctora Ireri Suazo Ortuño, quien además cuenta con el respaldo de un gran grupo de integrantes de la comunidad nicolaita, académicos y sindicalistas académicos, y se ha manifestado respetuosa de los derechos laborales, pues ella misma ha participado activamente en la vida sindical y ha hablado con diversas fracciones sindicales de académicos.

Asimismo el doctor Erasmo Cadenas Calderón, que en su plan de trabajo incluso reconoce el engaño al gobierno y el pueblo de Michoacán cuando se presentan como “ahorros y reducción del déficit” la falta de pagos y el doctor Salvador García Espinosa, quien tiene amplia experiencia en la política universitaria y reconoce que las reinstalaciones del personal debe darse en el corto plazo en la próxima Rectoría, y aunque ha sido cuestionado por algunos miembros de la comunidad nicolaita, debe reflexionarse si los trabajadores recibieron apoyo, en esta crisis universitaria, de los grupos que en su momento se presentaron como sus antagonistas o si sólo lucharon para acceder a un puesto político, como lamentablemente así fue para algunas y algunos, después de conseguir sus fines, se olvidaron de los movimientos que decían apoyar, como el de aspirantes y rechazados.