Piden consulta ciudadana sobre retiro de juegos mecánicos del bosque Cuauhtémoc

No se infringe ninguna ley porque la concesión del negocio de los juegos mecánicos finalizó, señala el alcalde

Ciudadanos plantean consulta sobre la remodelación que plantea el Ayuntamiento. | Fotografía: Ixchel Monroy

Morelia, Mich.- Al terminar la concesión a un particular este año, el Ayuntamiento de Morelia se apresta a retirar los juegos mecánicos ubicados en el Bosque Cuauhtémoc, tema en el que algunos paterfamilias se pronunciaron por una consulta ciudadana para decidir la suerte de las atracciones.

El Bosque Cuauhtémoc, es un pulmón de la ciudad y un espacio de recreación familiar. Cuenta entre otros atractivos con pista para correr y rampas para practicar skate. En sus inmediaciones se ubican los museos de Arte Natural y el de Arte Contemporáneo “Alfredo Zalce,” además de una ludoteca.

El área de juegos, integrado por columpios, resbaladillas, un tren y otros elementos, funcionan en el lugar desde hace casi 70 años, mismos que se prevé serán retirados la semana entrante para iniciar la instalación de juegos lúdicos de gran dimensión y que no tendrán ningún costo, de acuerdo con el gobierno municipal.

Los juegos mecánicos terminaron su periodo de concesión, dijo el presidente municipal, Alfonso Martínez Alcázar, quien cuestionado por este tema señaló que “será remodelado el espacio” y no consideró necesaria la consulta ciudadana.

“Es una decisión tomada, el Cabildo ha emitido ya un dictamen. Lo que ahí existió es un negocio particular. A los niños se les cobra por hacer uso de esos juegos. Lo que hará el municipio es poner nuevos juegos muy grandes y lúdicos, no mecánicos, pero si gratuitos para toda la gente. Se proyecta como un nuevo atractivo de la ciudad, en donde los menores puedan ejercitarse”, señaló.

Consideró que con la remodelación del lugar, “no se violentan derechos de nadie pues es una concesión que ya concluyó”, manifestó Martínez Alcázar en referencia al uso que hacían particulares de los juegos mecánicos. ”Ese espacio se está resignificando con el Skate Park para los jóvenes y con los juegos para los niños”, aunque al preguntar sobre espacios para los adultos mayores, dijo que “hay muchas otras actividades”, sin especificar ninguna.

Reconoció que la última intervención en el Bosque Cuauhtémoc se realizó en la Ludoteca, cuando estuvo en la administración anterior, que por cierto dos años se mantuvo sin mantenimiento por el cambio de administraciones.

Explicó que a la familia que tiene la “concesión” de juegos se le ofrece otra alternativa, se les da la posibilidad de buscar otro lugar, en un terreno que puedan comprar o rentar como el Tobogán Gigante, que tengan su propia propiedad, ellos pueden reubicarse. “Nosotros podemos apoyar para que eso suceda”, comentó y anticipó que será antes de concluir el año cuando se entregue la nueva área de juegos en el bosque.


Permiso costaba 180 mil pesos por año

Cuenta Genaro Escamilla Rangel, propietario de “Diversiones del Bosque”, que en 1952, con el ayuntamiento de Rafael García León, se otorgó el primer permiso para que el 30 de septiembre funcionara el trancecito. Así, al término de cada administración se renovó el permiso, hasta que, en 1991 con Salvador López Orduña, dejó de renovarse en la Secretaría de Ayuntamiento y el permiso comenzó a pasar por Cabildo, quienes entregaron permisos durante cada nuevo ayuntamiento para que funcionaran estos atractivos. Ahora no es que exista tal ´concesión´ de la que hablan, el Cabildo actual nos niega el permiso y solo nos dan 15 días para desalojar el espacio.”

El pago por el permiso anual, según Escamilla Rangel, era de 180 mil pesos.

En una rueda de prensa encabezada esta mañana por Ángeles Jaso y Escamilla Rangel dieron a conocer que además de hacer usos de los recursos para mantener sus necesidades básicas familiares, en este centro mecánico se da empleo a 10 personas que gozan de salarios y prestaciones de ley. Además, los trabajadores son jóvenes estudiantes de la Universidad Michoacana de San Nicolás Hidalgo y del Tecnológico de Morelia, así como adultos mayores.

Ángeles Jaso, dijo que no irán en contra del gobierno, reconoce que ese espacio es de las y los morelianos. “Queremos sumar no restar, parte de la sociedad que nos acompaña piden una consulta ciudadana. No vamos a pelear jamás, nuestro lema es hablar y entendernos. Si tenemos que salir saldremos dignamente”, dijo.

Por su parte, los jóvenes empleados hicieron un llamado a las autoridades para que no les quiten sus empleos y permitan que estos juegos permanezcan en este espacio, expusieron porqué deben quedarse: “más que nosotros que cuidamos y manejamos los juegos, también esta una veintena de comerciantes que se encuentran afuera del área y dependen de que existan clientes para vender sus mercancías”.

“Trabajar aquí me permite ayudar a su madre y mantener mis estudios en el Tecnológico de Morelia. Si retiran los juegos no podrá apoyar a mi familia”. “Estas atracciones son parte de la historia urbana”.

Jorge Luis D, es el operador del Tren, “en este juego se suben personas de la tercera edad, lo mismo que mamás con sus bebés, novios y es un juego que también disfrutan las personas con discapacidad. Creo que el proyecto por el cual quieren cambiar los juegos mecánicos es bueno, pero existen otros espacios donde colocarlo, colonias donde no hay atractivos y también es necesaria la diversión sana y gratuita”.

El lugar, confluencia generacional

Para algunos ciudadanos, tampoco resulta grato el que retiren este divertimento. Opinan que debía hacerse primero una consulta ciudadana, incluso mientras se realizó la rueda de prensa hubo manifestaciones de usuarios a favor de dicha consulta.

Lorena, dice que “es indispensable una consulta ciudadana porque el parque no es del gobierno, tampoco de los dueños de los juegos, es de la ciudadanía y no nos toma en cuenta. El presidente actúa de manera arbitraria”.

Consuelo, mujer de 60 años, dijo “no quiero que quieten los jueguitos, yo vine de joven, de madre y ahora como abuela. Es un espacio donde convive toda la familia”. Ana y Leticia, madres muy jóvenes, opinan que “estamos en desacuerdo que los quiten, son juegos muy accesibles para niños chicos y grandes. Queremos que gocen nuestros hijos y sobrinos. Es injusto que el municipio tome acciones tan tajantes, Si quieren poner más juegos que los manden a otra parte, este lugar ya es una tradición, si los mandan a otro lugar, no podremos gastar en pasajes. Ojálanos nos tomen en cuenta y nos respeten como ciudadanía”.

Elena, mientras empezaba a subir a sus hijos al carrusel compartió, “se me hace malo. Desde que yo era niña mi papá nos traía. Nos compraba golosinas. Nos subíamos a los juegos. Se me hace feo que mis hijos, menores de 5 años, no vayan a disfrutar de esto que yo gocé”.

Salvador, quien visitaba el parque de la mano de sus hijos, comentó al respecto “considero que los cambios son importantes, pero los cambios ordenados. La idea de hacer llegar juegos a los niños es importante pero aquí los juegos mecánicos funcionan bien, hay otros puntos de desarrollo en Morelia que le vendría bien el apoyo del Ayuntamiento y la zona de aquí ya es algo tradicional. La orden de quitarlos tiene tintes autoritarios y no democráticos como Alfonso Martínez quiere manifestar. Aquí convendría establecer una mesa de dialogo con los concesionarios de los juegos y si han de tener que retirarse, que sea de una manera paulatina, en un lapso de tiempo razonable no en 15 días ni en cualquier lugar”.

Jorge, acotó: “No está bien. Mi mamá nos traía y así nada más nos quieren arrebatar todas las atracciones, para colocar cosas que ni valen la pena. Luego hacen cosas así y las dejan otras administraciones en el total olvido, se hacen nido de ratas. Además, si retiran estos juegos pienso que discriminan a los bebés que viene aquí a subirse con el abuelito. Discrimina también a las personas con discapacidad. Aquí disfruta desde el más chiquito hasta el más grande. Aquí es económico”, señaló en referencia a los ocho pesos que cuesta el boleto para acceder a cualquier juego.

Para los vendedores que se encuentran fuera del espacio, tampoco está bien que los retiren.

María, mujer de casi 80 años, señala que, “el espacio es de los morelianos. Invito a la gente a sumarse a una consulta ciudadana. Yo vendo papas afuera y tengo recuerdos de muchos años, cuando mis hijos me acompañaban y ahorita mis nietos”.