Morelia, Mich.- Realizada la consulta ciudadana e integradas las observaciones respectivas, el titular de la Secretaría de Medio Ambiente de Michoacán (Secma), Alejandro Méndez, señala este jueves para la firma del decreto que convertiría 5 mil hectáreas del Cerro del Águila en Área Natural Protegida (ANP) de orden estatal.
Este 11 de mayo será entonces cuando se firme el decreto oficial con que el gobierno del estado de Michoacán asumirá la responsabilidad de conservar esta área natural ubicada entre Morelia y el municipio de Lagunillas. El objetivo será protegerla de las amenazas que pudieran implicar la afectación o destrucción de la riqueza ecológica que representa. Entre los riesgos, destacó el secretario Méndez, están la urbanización, la especulación inmobiliaria y el cambio de uso de suelo para huertas de aguacate.
El polígono originalmente contemplaba una extensión de 3 mil 500 hectáreas, pero derivado de la participación ciudadana a través de la consulta, la autoridad estatal determinó que el área protegida deberá ser de un total de alrededor de 5 mil hectáreas. “Mil quinientas más”, enfatizó el secretario Alejandro Méndez.
Las principales observaciones de ejidatarios y ciudadanos, comentó, iban en dos direcciones. Por un lado, “hay personas a las que no les gusta que se emita un decreto para su territorio (…) no querían que el polígono incluyera sus predios”.
Como contexto, refirió que un motivo para el cambio de uso de suelo en la zona ha sido “fundamentalmente para el establecimiento de huertas de aguacate y otros cultivos”. Sin embargo, reivindicó que la declaratoria permitirá proteger la cobertura vegetal de la zona frente a este tipo de actividades.
En sentido contrario, expuso, hubo observaciones por parte de académicos y ambientalistas que querían que se protegiera hasta el doble de lo que se planteaba originalmente, es decir, 7 mil hectáreas. “Querían que se incluyeran varios centros de población como San Nicolás Obispo y San Antonio Parangaré, entre otros”.
El problema de esta propuesta, argumentó, es que “es muy complicado meter áreas urbanas en un área natural protegida”.
Según la visión del secretario, quedará un polígono lo suficientemente grande para que se garanticen los servicios ambientales que se está buscando proteger. Explicó que incluye principalmente la zona arbolada del cerro y mil 500 hectáreas que se adicionaron, cuyo uso de suelo será determinado como agrícola.
En cuanto a esta parte añadida, detalló que “no son huertas de aguacate, sino parcelas, una parte que ya es agrícola desde hace mucho tiempo, donde lo que se busca es frenar la especulación inmobiliaria, la urbanización”.
Diez ejidos de la zona participaron en la consulta
Según información proporcionada por Daniel Díaz, director de Ordenamiento de la Secma, durante el proceso de consulta se tuvieron 10 reuniones: siete en las que se atendió a un total de 145 ejidatarios, dos en las que se atendió a 17 pequeños propietarios y una reunión institucional. Hubo 20 ciudadanos que participaron también.
En el documento recibido por el medio se presenta información acerca de que, por el lado de Morelia, fueron atendidos los ejidos de La Mintzita, Joya de la Huerta, San Nicolás Obispo, Tacícuaro y La Nueva Florida. En cuanto a lo que corresponde a Lagunillas, se atendió Huatzanguio, San José Coapa, Iratzio, Las Pilas y Jesús Huiramba.
En cuanto a las necesidades expuestas, se destaca que la autoridad estatal recibió 11 observaciones al Estudio Técnico Justificativo por parte de diversas organizaciones civiles, ciudadanos y académicos.
Cerro del Quinceo todavía no tiene fecha
El proceso correspondiente a la protección del Cerro del Quinceo por medio de una declaratoria de ANP todavía no tiene fecha final, pues la consulta cerró apenas en los últimos días de abril. El secretario Méndez dijo que todavía están procesando la información recabada.
La principal queja, adelantó, es de tipo social: “Hay muchos grupos que han estado invadiendo el área del (cerro del) Quinceo para hacer asentamientos urbanos irregulares. La mancha urbana ha estado afectando esta zona”.
De hecho, en información proporcionada por el director de Ordenamiento, Daniel Díaz, se destaca que la autoridad estatal ha recibido incluso dos actas de asamblea de los ejidos Quinceo I y Quinceo II en donde se hace explícito el acuerdo comunitario en contra de la incorporación de sus predios al decreto de ANP.
Hasta el momento se han llevado a cabo cinco reuniones-talleres en donde ha participado un total de 180 personas: 22 ejidatarios de Chiquimitío, entre 15 y 20 de Quinceo I, entre 80 y 100 de Quinceo II, 22 de Las Flores, uno de Oponguio y 13 ciudadanos más.
