Morelia, Mich.- Una treintena de elementos de la Guardia Civil amenaza con replegar a vecinas de las colonias que se oponen a la construcción de un gasoducto al sur de Morelia. Las ciudadanas salieron esta mañana a manifestarse en el libramiento a la altura de la calle Encuentro de Maravatío, por la parte de atrás de Wal-Mart La Huerta.
El líder de los granaderos en el sitio se acercó a pedir al contingente que se retirare, debido a que estaría afectando a terceros. Ante la negativa de las cuiudadanas, quienes defendieron su derecho a manifestarse pacíficamente, el policía advirtió que el cuerpo policíaco de orden estatal las retiraría.
Las inconformes se encuentran sentadas en sillas como una muestra de que su manifestación es pacífica, y de que continuarán en pie de lucha hasta que se modifique la ruta de la obra.
La atmósfera es tensa, debido a que las manifestantes dicen haber recibido información trascendida de que en cuanto la prensa abandone el lugar, la Guardia Civil del procederá a la represión de la acción civil pacífica.
Son alrededor de veinte manifestantes, la mayoría mujeres, quienes con pancartas y lonas en mano salieron a exigir una respuesta pronta por parte de las autoridades municipales, quienes —acusan— no han dado mayor información acerca de la obra ni consultaron a los vecinos ante de otorgar el permiso de construcción.
En la última conversación entre autoridades municipales, representantes de las empresas y el comité “No al gasoducto”, el secretario del ayuntamiento, Yankel Benítez, se comprometió a negociar con la empresa constructora la posible modificación del trazo de la obra. Hasta ahora no han obtenido respuesta.
El comité instaló un plantón el 2 de mayo y han interpuesto diversas solicitudes de información acerca de la obra. No han recibido respuesta por parte de la administración del presidente municipal Alfonso Martínez Alcázar.
El comité vecinal dice contar con más de 2 mil firmas de vecinos de alrededor de 24 colonias, quienes han expresado su apoyo al movimiento, debido a que consideran que corren riesgos por el hecho de que la obra pase cerca de sus casas.
El gobierno municipal ha argumentado que la obra es de orden federal y que, por lo tanto, no es su responsabilidad frenar o modificar la obra. Por su parte, las vecinas acusan que el ayuntamiento sí otorgó un permiso y, por ende, también lo puede retirar.
La manifestación inició alrededor de las 10 de la mañana. Si bien el grupo de vecinas tenía temor de que llegaran a replegarlas, debido a los amagos de la autoridad municipal en este sentido en semanas anteriores, también dijeron que es mayor su temor a que sus familias y patrimonios corran riesgo por la construccion del gasoducto, el cual, acusan, carece de las más mínimas medidas de seguridad. “Si nos llevan a una, nos llevan a todas”, remataron.
Granaderos de la Guardia Civil comentan al momento que están a la espera de representantes del municipio y de la Secretaría de Gobernación del estado para negociar con las manifestantes.
De no tener una solución pronta, dicen las voceras del movimiento vecinal, estarán subiendo permanentemente al libramiento para detener la circulación, como una manera de protestar ante la omisión de la administración de Martínez Alcázar.
Ante el cuestionamiento de automovilistas y ciudadanos que pasan alrededor del grupo manifestante, las voceras responden que esta no es la primera acción que se realiza: “El 9 de mayo metimos el primer oficio em el ayuntamiento, hace mas de un mes, y todavía no nos dan respuesta. El Ayuntamiento es el que nos ha obligado a esto haciendo oídos sordos a nuestra petición”.
