Morelia, Mich.- Los incendios de los cerros El Tejocote, Cerro Grande y La Beata han sido, por diferentes razones, los tres más significativos en los seis meses del año en curso, según Rosendo Antonio Caro Gómez, titular de la Comisión Forestal del Estado de Michoacán.
El incendio que se dio en el cerro El Tejocote, situado entre los municipios de Turicato y Madero, está en la lista por la superficie afectada que resultó del siniestro, 300 hectáreas.
El que a juicio del comisionado es “el de mayor relevancia en lo que va del año” es el que se registró en Cerro Grande, entre la comunidad de Patamban (en el municipio de Tangancícuaro) y Pamatácuaro (en Los Reyes).
La razón por la cual lo cataloga de esta manera no es sólo por la gran extensión que resultó afectada (entre 650 y 700 hectáreas), sino porque “es muy palpable la negra intención de [provocar un incendio para] cambio de uso de suelo para huertas de aguacate”.
El tercero es el que se registró en el cerro de La Beata (Zamora), que afectó a una superficie de 300 hectáreas y mantuvo ocupado a las brigadas comunitarias, estatales y hasta fuerzas federales, durante más de 15 días.
La razón por la cual llama su atención este incendio, es por “el desinterés, el cinismo y la total irresponsabilidad de parte de algunos actores sociales” que están provocando los incendios para probar la capacidad de respuesta del estado. “Era muy evidente que el comportamiento del fuego era atípico, eso sólo se explica por acción humana”.
En este último caso, como en otros, no se tienen mayores datos como para poner denuncias hacia personas específicas. Sin embargo, el funcionario comenta que la Cofom está preparando un paquete de 40 denuncias judiciales para interponer ante la Fiscalía General del Estado (FGE), las primeras que se presentarían en todo el año por parte de la dependencia.
Cada denuncia va a corresponder a un incendio relevante, declara el comisionado, según ciertos criterios definidos entre instancias del gobierno del estado y gobierno federal. No dio a conocer cuáles son esos criterios, pero dijo que con base en ellos se calificará cuáles son los 40 incendios más relevantes para poder presentar las respectivas denuncias ante la FGE.
Migración forzada
En la reciente entrega de Julio Santoyo Guerrero titulada “Serranía de ceniza”, publicada por Cambio de Michoacán, el autor sostiene que de un recorrido que hizo entre los municipios de Madero y Cojumatlán de Régules, recopiló información acerca de la posible migración forzada de decenas de familias que trabajan los pinares en el Cerro de La Laja, debido a los incendios forestales que afectan sus actividades económicas, sin que hasta ahora haya alguna intervención gubernamental para atenderlas.
Cuestionado sobre el tema, Rosendo Caro dijo no tener información al respecto, pero reconoció que estas publicaciones “nos obligan a abrir otro frente en cuanto a nuestra actividad”. Puntualizó, sin embargo, que esta problemática (“si es que se da”) tendrá que atenderse de manera coordinada junto con otras instancias.
