Morelia, Mich.- Tras el concierto del proceso de selección de director de la Orquesta Sinfónica de Michoacán (Osidem), este viernes se presentó formalmente Enrique Arturo Diemecke al frente de la agrupación musical.
El considerado uno de los tres conductores musicales más importantes de México durante las últimas décadas, junto a Carlos Chávez y Eduardo Mata, refirió en el inicio de la temporada de otoño de la Osidem estar emocionado por encontrarse ya como director en el Teatro Ocampo, donde buscaría seguir compartiendo la belleza de la música lo que dure su estancia en Michoacán.
Ante la presencia de las autoridades culturales en el estado, el programa musical dio inicio con Die-Sir-E, obra de la autoría del propio Diemecke, la cual surgió durante la Copa Mundial Francia 1998, misma que encendió el ánimo de los más de 400 asistentes al recinto cultural.
Acto seguido, la intensidad continúo con la Sinfonía 2 de Sergei Rachmaninoff, a quien Diemecke, en los pocos momentos que ha compartido con la Osidem, parece ser afecto, además de su ya conocida predilección por Mahler.
Compuesta entre 1906 y 1907, la sinfonía de Rachmaninoff es una secuencia dramática que se identifica con la tradición sinfónica rusa, tras la cual la Osidem interpretó un ritmo brasileño que, paradójicamente, hizo que los asistentes realizaran “la ola”, conocida en el orbe durante la Copa Mundial México 1970, con lo que finalizó el concierto.
